—¡San, ya llegamos! —Gritó Jongho, San estaba pensando tanto en los problemas que tiene con Wooyoung que se olvidó de casi todo.
San no podía ver mucho desde donde estaba sentado, pero por la reacción de su hermano, supuso que las vistas eran más bonitas de lo que se imaginaba. Su hermano bajo de la carroza lo más rápido que pudo, San no estaba tan emocionado como lo había estado hace una semana y se esforzaría por impresionar.
—Ve bajando tú. —Preferiría que Jongho socializase más que él.
—No, primero tienes que bajar tú, después bajo yo. — San iba abrir su puerta, pero uno de los mayordomos lo hizo por él. Se sintió triste al no tener su anillo de compromiso con él, le había tomado mucho cariño al anillo de aguamarina.
Iba a despedirse de Jongho antes de que lo jalasen a su perdición, sin embargo, el ya no estaba. "Ah dios, tengo que tragarme mis malas palabras" Pensó con tristeza mientras era llevado hacia el altar, podía verlo desde tan lejos, podía ver las sillas y esa alfombra roja que apuntaba sin pena el altar.
La boda era al aire libre, en un lugar que San no conocía, se veía que fue pacifico hasta que Wooyoung trajo a toda esa gente. "No me gusta el blanco... Mucho menos las rosas." Sentía que era raro, que él hubiese deseado que sus padres estén aquí, que su verdadera madre estuviese ahí.
"Las bodas están relacionadas a la iglesia... Espera, yo soy un demonio" Cada vez que San se acercaba al altar, cada vez más quería golpear a su prometido. La música espantó a San estaba demasiado fuerte y el mayordomo lo dejo "escondido" de todos los invitados para que empezara la boda.
Wooyoung estaba hablando con el oficiante de boda para distraerse de todas las miradas que le daban los demás, siendo él, el príncipe heredero, lo que más espera la gente que Wooyoung invito era que se volviera el rey. Un rey acompañado de alguien que lo ame y viceversa. "Wooyoung no me ama y yo solo lo quiero".
Había otras chicas que estaban cerca del altar hablando animadamente, San podía escucharlas, podía escuchar a todos. Sobre un gran lazo y una corona. "¿Lazo, corona?" Parece que es un lazo que tenía perlas de aguamarina y la corona llevaba esmeraldas, "mi piedra favorita, la aguamarina es el mejor"
Quizás todas las personas sentadas eran amigos de Wooyoung, ahora que lo pensaba mejor, San no tenía amigos afuera del castillo ni mucho menos fuera de su hogar. Su hermano era más social, pero Jongho se encontraba sentado casi al final de las sillas para no llamar la atención de nadie.
San tampoco quería llamar la atención, si todos se daban cuenta de que él se estaba escondiendo, al final llegaran a una conclusión totalmente errónea. "Señor mayordomo, ¿Dónde está?" Justo cuando había dicho esas palabras el mayordomo apareció con una flor blanca, bueno no era una flor, era un tulipán.
—El príncipe heredero dijo que usted llevara esto—El mayordomo le paso el tulipán con felicidad plasmada en su rostro. La música cambió y fue por las canciones típicas de una boda—El padre de Wooyoung vendrá por usted y será llevado al altar por él.
San iba a decirle que él podía ir solo, aunque no pudo decirle nada porque el padre de Wooyoung ya estaba detrás de él carraspeando claramente enfadado: —Es una falta de respeto que le trates de dar la espalda al antiguo rey. — San no contestó y el antiguo rey ese, le hizo el gesto del brazo. ¿Se suponía que San debería darle su brazo? Pues no pensaba hacerlo.
Bueno lo hizo, porque no quería dar más mala impresión. Se colgó del gran señor del cual no sentía empatía y simplemente empezaron a caminar, San se sentía como una novia absurda y más con el hombre as u lado quien no le daba ni una vista. "¿Las novias se sentirán así de avergonzadas cuando son llevadas al altar?" San se sentía muy avergonzado con la música, se sentía avergonzado de que todos se girasen a verlo. Debería de tener la cabeza en alto pero lo único que cabía en su cabeza era mirar la alfombra llenada de pétalos de flores.
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He's so kind | WooSan
Fantasy;; Wooyoung es el heredero al trono y con toda su curiosidad va al pueblo para cumplir su mandato. Pero esto lo lleva a san, quien está cansado de lo bocatas que su hermano, Jongho, puede llegar a ser. Jongho le tiene un gran miedo a los magos con g...