Ultimamente he estado muy perdida.Por un momento pensé que todo iba bien; terminé con la relación tóxica del capitulo pasado y aunque lloré un montón y duré un mes algo apagada por las razones por las cuales terminó, prontamente me fui levantando; creí haber encontrado mi lugar, me estaba adaptando con mayor facilidad a los estudios y salí mucho con conocidos. Digamos que me distraje por un momento.
Todo eso resultó ser una ilusión óptica, quizás un vil efecto de los medicamentos de mi terapeuta. Pensaba que me había encontrado, que me había aceptado a mí misma, pero nunca fue así o al menos fue así hasta volver escuchar comentarios denigrantes acerca de mi persona. He llegado al punto de no querer siquiera comer y mucho menos confiar en la gente.
Me he querido aislar porque no quiero molestar a nadie con mi presencia toda preocupada y sin ganas de seguir. Hace 1 mes o algo así, salí a un bar, allí tocarían unos amigos y de repente veo este chico que conocí alguna vez en la puerta y decidí pasar la noche dentro del bar con el para que no se sintiera solo. El chico estaba algo drogado o algo así pude notar porque tenia los ojos rojos o algo pero como soy ingenua no hice caso a esas señales.
El punto es que esa noche ambos nos queríamos ir a casa, o en mi caso era así porque estaba muy agotada y al otro día tenia cosas que hacer desde muy temprano, así que el me dijo que me iba a dar un aventón a cambio de que yo primero lo acompañara a que se comprara algo de comer y yo acepté.
En el camino estuve algo ansiosa porque parecía que íbamos a un lugar demasiado lejos porque tardamos en llegar al destino que él tenía para nosotros, hasta que vi luces y ahí fue cuando entendí todo. Habían moteles por cualquier lado que miráramos y para mí ya era muy tarde porque cuando intenté preguntarle y al final escapar, el auto tenia seguro para niños, el no dijo ninguna palabra al respecto y ya estábamos dentro del parqueo de la habitación.
No saben lo asustada que me encontraba, tanto así que no podía siquiera moverme o decir una palabra. Él me tomó en sus brazos, entró conmigo a la habitación y me lanzó a la cama. Yo estaba que temblaba de los nervios y él, hombre al fin y mucho mas fuerte que yo, acabó con lo que quedaba de mi dignidad. Exploró partes de mí que nunca le permití a nadie explorar (como mi parte trasera) y mencionaba cosas asquerosas como que quería sentir a su mujer y que sería suya para siempre. Al menos después de todo eso me dejó en casa de mi mejor amigo y con el me pude desahogar aunque él sepa y entienda otra versión de la historia, por lo menos estuvo ahí para mí.
Al otro día me sentía asquerosa y si ya veía de mala manera a los hombres, ahora sí es verdad que los veo de la peor forma posible. Hoy también estoy aquí donde mi mejor amigo y mañana me acompañará a ver un ginecólogo para ver si pude contraer alguna enfermedad de transmisión sexual o algo así porque esta semana mi parte intima ha tenido algunas variaciones muy raras y la verdad que tengo mucho miedo. Yo creo que si el doctor me dice que tengo alguna ETS, no seré capaz de seguir aguantando vivir y peor aun no sabría cómo decirle a mi familia porque hasta ahora no lo sabe ninguno de ellos y no quiero ni haré que lo sepan jamas.
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Recuerdos omnipresentes.
Short StoryA veces despertamos irradiando positivismo por nuestros poros y creyendo poder meternos todo el mundo por la boca. Pero en el momento en que miramos atrás todo se nos nubla, todo se nos pierde, todo se desborda. Esto es una especie de diario persona...