Capítulo 25

1.3K 138 10
                                    

Horas después, Bárbara manejó con Macarena al mismo estudio el día anterior, se estacionó en la entrada del edificio y esperó a que su novia bajara de la motocicleta; y qué hermosa era con su cabello al viento. La miró, tonta y sonriente. Y luego puso ese par de ojos en los de ella y la sonrisa hizo que su corazón se acelerara lo más rápido posible.

"Llámame si quieres que te recoja".

Macarena se volvió hacia su novia, con los ojos muy abiertos.

- ¿Como?

- ¿Qué?

"¿No te vas a quedar conmigo?"

Bárbara se encogió de hombros. Macarena se puso las manos en las caderas; Dios, qué sexy se ponía cuando hablaba en serio.

"No creo que deba quedarme hoy, bebé".

- ¿por qué?

- No quiero que pienses algo malo ...

- ¿Te volviste loca?

- Una vez en tu ensayo, está bien. Puedes encontrarlo malo, puede molestarte, no quiero molestarte.

Macarena mantuvo su postura y Bárbara tragó saliva.

"No puedo creer lo que estoy escuchando".

- No te enojes, estoy ...

- Siendo estúpida - Macarena la interrumpió.

Bárbara abrió mucho los ojos.

- Te estoy pidiendo que te quedes.

"Lo sé, amor, pero no puedo salir cada vez que tienes un ensayo y dejar a Gonzalo completamente solo". Por mucho que no le importe ...

Macarena se quitó las manos de la cintura y miró hacia abajo; Como casi vencida, Bárbara arqueó una ceja.

- ¿Qué pasa?

- Nada.

- Habla conmigo bebe

"Desearía que te quedaras".

- Y quiero quedarme, amor.

De repente, dándose cuenta de lo que se había llamado, Macarena miró a su novia con una sonrisa tan brillante que era casi cegadora.

- ¿Cómo me llamaste?

Barbara sonrió de lado.

- Amor. Eres mi amor, no es obvio?

- Me gusta eso. Tú también eres mi amor.

"Realmente quiero quedarme, pero no creo que sea correcto. ¿Recuerda que tenemos que separar las cosas? Tienes que caminar sola, bebé. Yo solo estoy aquí para babear por ti. Si entro en cada ensayo, terminarán poniéndome de nuevo como sujeto de prueba.

- ¿Y eso sería malo?

- No. Pero no soy modelo. Sorprendiendo a la mujer, Bárbara tiró de Macarena por la cintura y sus cuerpos chocaron deliciosamente. "Y puedo ser tu sujeto de prueba cuando lleguemos a casa". Puedes probar todas las poses que quieras conmigo más tarde.

Sonriendo, Macarena envolvió a su novia alrededor del cuello.

- Me gusta esa idea.

- ¿Entiendes lo que quiero decir?

- si

"Parte de que tengas tu independencia, mi amor, es hacer las cosas por tu cuenta, sin que yo tenga que estar cerca". Eres autosuficiente, Macarena Achaga, y aunque me encanta estar contigo cada segundo del día, no quiero controlarte. Eres libre. Eso me parece importante.

El mar de tu mirada | Barbarena I Terminada I EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora