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—Un año.
—¿Disculpa?
—Hace un año, mi hermana Loren se mudó. Que bella es la vida, ¿no?
Había pasado un año desde que la hermana de Addison y Caleb cortaron su relación y la mayor se mudó al terminar la secundaria. Más alla de eso, no habíamos hablado con Caleb, no porque aún no le perdonaramos lo que nos hizo si no porque el jamás se disculpó o volvió a nosotras.
Pero aunque Addison solía tener sentimientos hacia él, ya lo había superado.
Seguíamos el camino hacia mi casa, algo aburridas.
—Ya cumplirán ¿10 meses?, con Noah.
—Si—sonreí pensando en él.
Escuchamos unos gritos de unos chicos y miré a mi amiga. Había dos opciones, correr a ayudar o correr y escapar de lo que sea que sucedió. Aunque la segunda era por la que más tirábamos, salimos en ayuda de los chicos.
En medio de la calle donde numerosos autos pasaban, cuatro chicas y un chico trataban de esquivarlos torpemente.
Corrí hacia ellos y los atraje hacia la vereda donde ya nadie los podría atropellar causando un accidente.
—¿Qué hacían en la calle?—preguntó Addison, confundida.
—Nosotros... ¿Qué son esos?—preguntó una pelirroja.
—¿Hablas de... los autos?—dije riendo.
Voltearon a verme sorprendidos y se miraron entre sí. Seguido de eso me abrazaron con fuerza y exclamando que me extrañaron.
—Woah. Calma—los alejé. —No pueden ir por ahí abrazando a extraños.
—Grace, no sabes hace cuanto no nos vemos.
Fruncí el ceño al escuchar a la pequeña rubia decir mi nombre. Todos traían ropas muy ridículas y supuse que venían de alguna especie de obra teatral.
—No sé como sabes mi nombre pero... Denada por salvarlos, ya nos íbamos.
—2020 y adolescentes no saben cruzar la calle—se burló Adds y reí.
Los chicos hicieron muecas de terror ante aquello y los dejamos atrás para ir a mi casa.
Antes de llegar, pasamos por la cafetería Speranza y paramos a 'comprar café'. En realidad era una tonta excusa para que Addison vea al chico que le gusta: Gilbert. Él trabajaba allí así que siempre que veníamos nos atendía con una sonrisa hermosa.
—Damas, bienvenidas devuelta. Aquí tienen lo de siempre—nos tendió dos vasos con café y los agarramos.
Gilbert y yo saltamos al tocarnos, electricidad. Miré con rareza mi mano y a él.
—¿Todo bien, Grace?
—Si, Adds. Solo que, creo que me pateó electricidad.
Ella asintió. Se despidió de Gilbert con una sonrisa y él le guiñó el ojo. Alcé las cejas ante aquello pero me quedé callada.
Cuando llegamos a casa mi hermana Rose estaba en una silla enojada.
—¡Grace! Dijiste que vendrías temprano para ir a baile.
—Lo siento, Rose. Olvidé que hoy tocaba—contesté.
—Vayamos ahora o llegaremos tarde—apuró mi amiga.
—Eres hermosa—me dijo Noah mientras acariciaba mi cabello.
Sonreí ante el gesto. En verdad le quería.
Sonó el timbre y nos dirigimos a la próxima clase. Me senté junto a la ventana para poder apreciar la linda vista de afuera pero ciertas personas estaban escondidas abajo de ella. Abrí la ventana y fruncí el ceño.
—Ustedes son muy raros.
—¡Grace!—exclamaron.
—¡Desconocidos!—grité con ironía.
—Debemos hablar. Debes ayudarnos.
—¿A cruzar la calle?—el chico rodó los ojos por mi respuesta.
—¿No nos recuerdas?—preguntó una rubia.
—Por supuesto.
Ellos sonrieron con emoción.
—Ayer los ayudé de que los atropelle un auto.
Resoplaron al unísono y reí.
—Grace, somos tus amigos de Green Gables. Josie, Ruby, Diana, Anne, y yo Jerry.
—No me suenan de ningún lado y esto se llama Grey Gables. Ahora si me disculpan, comenzará la clase—comencé a cerrar la ventana pero Diana gritó haciendo que la suelte.
—¡Viajamos en el tiempo! O eso creemos. Venimos de 1890, tu estudiabas con nosotros hasta que desapareciste y ahora te encontramos aqui.
—Seguro, y yo soy una espía—Ruby me miró asustada pero luego relajó la mirada al entender mi sarcasmo.
Cerré la ventana y me concentré en la clase. Al finalizar tuvimos un pequeño descanso hasta que llego la profesora de historia. Y ahí recorde: ¡EL EXAMEN! Lo había olvidado por completo.
—Pst.
Cerré los ojos, cansada de ellos y los ignoré.
—¿Esa es la señorita Stacy? Eso significa que si eres Grace, Grace. ¡Vives aquí en el futuro! Eso tiene mucho sentido. ¿Donde está Gilbert, huh?
Fruncí el ceño ante Ruby.
—¿Hablas del mesero de la cafetería Speranza?
—¿Cafeteria Speranza?—vi a Anne algo confusa, había visto su nombre antes.
Como si un foco se hubiese prendido arriba de mi, les sonreí con emoción.
—¿Son del pasado?
—¿Si nos crees?
—Depende. ¿Me ayudarían con algo?
Algunas cosas cambiaron! Como Addison gustando de Gilbert y en vez de estar con Noah, él esta con Grace ya que si recordamos, antes de su viaje a Avonlea le gustaba. Rose, Addison y Grace van a clases de baile!! Y por último, Grace no es buena en la escuela. ¿Quién sabe? Quizás el ser espía había cambiado su vida lo suficiente para que su intelecto incrementara. Mañana tendremos un capítulo narrado por Gilbert!¡ Y nos contara que pasa por su vida, y unos extraños clientes llegaran a su cafeteria...
