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Ámbar.

Ya no se que hago mal,no se si soy yo misma,o la vida siempre me caga,o nunca podré ser feliz,cansada de ilusionarme y que todo salga para el orto.

Mi ex,el cuál le entregué todo,hasta perdí mi virginidad con él,me puso los cuernos con mi prima,es muy doloroso verlo con tus propios ojos,lo amé tanto,pero el me demostró lo contrario.

Chasquean los dedos enfrente mío,mi primo,Mauro,me esta llevando a una joda,la verdad no tengo ánimos de ver a gente que toma,se droga,se besa,hasta coge enfrente tuyo,pero estar en la cama todos los días es agotador.

Llegamos a una mini mansión,demás esta decir que había gente por todos lados,entramos y nos silban desde una esquina,un grupo bastante grande de pibes,empezó a saludar a mi primo.

-ella es Ámbar,prima ellos son todos mis amigos-comentó.

Saludé con un simple "hola" y me senté al lado de él,era incómodo porqué no había ni una mina para hablar,aunque con los hombres me llevo más, pero que todos te estén mirando,es incómodo.

Me levanté y le dije a Mauro que iba a buscar algo para tomar,porque estar ahí y que todos te miren además ni te saquen tema de conversación,es un embole.

Llego a la especie de barra y le pido a un rubio,un wisky bien fuerte pero con bastante hielo,lo cuál en menos de diez segundos me lo da.

Me siento en una silla alta de ahí,y empiezo a mirar la especie de joda,minas perreando y pibes mirando como virgos.

Era más divertido estar en mi cama tapada hasta arriba comiendo chocolates.

-no te gustan las jodas?-comentó el morocho,amigo de Mauro.

-la verdad que no,prefiero estar en mi cama,antes que soportar música fuerte,y gente bailando-hablé tomando de mi trago.

-nadie te obliga a estar acá,me llamó Ignacio, pero decime Nacho-comentó tomando de su vaso y estrechando su mano con la mía.

-obvio,nadie me obliga,pero,me quise despejar un poco,un gusto Nacho,mi nombre ya lo sabés igual-hablé aceptando su saludo,y refiriéndome que me presenté cuando llegamos.

-te molesta si vamos afuera?,así hablamos mejor?-comentó bajándose de aquella silla alta.

(...)

-jajajajajajaja Mauro es un inmaduro desde chiquito-comentó riéndose,le contaba cuando Mauro se largaba a llorar todos los días porqué mi tía, siempre lo mandaba a dormir temprano, tremendo boludo.

-jajajaja si,gracias,me salvaste la noche-hablé riendome tímidamente,mientras miró el cielo.

-pensé que la joda iba a estar aburrida,pero me hice una amiga nueva,y si nos vemos en otra joda, volvemos a charlar-comentó fumando de su cigarrillo.

-jajajaja obvio que si,me tenés que pasar tu número,al menos se que si me siento mal puedo hablarte-hablé pasándole mi celular para que se agendara.

-ay tarada,estabas acá, pensé que te habías ido-comentó Mauro interrumpiendo nuestra charla con el morocho.

-estoy bien,Nacho me salvo de esa joda tan aburrida-hablé parándome para poder irnos.

-bueno vamos,que son las cinco ya-comentó mi primo con un poco de apuro.

Me despedí de Nacho y nos fuimos,llegamos a casa,si,vivimos juntos, a los dieciséis años nuestros papás murieron,estábamos en la casa de mi abuela,y nuestros papás iba de viaje en auto,cuando un camión se atravesó, y ninguno resistió.

Algunos familiares nos cuidaron por meses,pero como vieron que entre los dos nos sabemos cuidar, nos dejaron vivir solos,desde ese entonces, no nos separamos más, y Mauro es como un hermano para mi,es mi única familia,y es en el único que confió.

Cada uno a su habitación,a dormir,seguro que cuando mañana nos levantemos,hablaremos de lo que le pasó a cada uno en la joda,y,bla bla.

Abrí mi cama,que por cierto,la extrañaba, y me acosté lo más tapada posible,al fin y al cabo me re dormí.

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Es lo primero que salió, comentennn si les va gustando o no we

Gato;eckoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora