Sad Song

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-Princesa!- Gritó el chico de gemas esmeraldas, corriendo a toda velocidad por las calles parisinas, cuando por fin pudo visualizar a esa hermosa mujer que le sacaba un sin fin de suspiros y sonrisas al momento en que la veía. -Te extrañé mucho. Me sentí como un gatito abandonado ayer que te fuiste- Habló Adrien abrazándose con fuerza de su chica azabache.

-Eres un gato muy dramático Adrien- Dijo entre risas Marinette, pues habían pasado solo unas pocas horas desde su último encuentro. Sin embargo, aunque no lo dijera en voz alta, Marinette si que lo hechó de menos, aún si sólo fue un minuto en el que no se encontrara junto a él.

Eran días llenos de amor, sonrisas y felicidad para ese dúo de superhéroes, quienes al momento de revelar sus identidades, su amor solo creció más al conocer verdaderamente la otra mitad imperfecta de quien era el amor de su vida, pues aprendieron que lo más hermoso eran sus perfectas imperfecciones, aunque al mismo tiempo no dejaban de creer lo ciegos que pudieron llegar a ser.

You and I,
We're like fireworks and symphonies exploding in the sky,
with you, I'm alive
like all the missing pieces of my heart
they finally collide

-Ese akuma si que tenía más de siete vidas- Exclamó un Chat Noir cansado. Esa tarde la joven pareja tenía muchas actividades planeadas que querían realizar juntos, pero fueron frustrados por el aparecimiento de un villano, quien les dió una larga pelea. Con el tiempo los akumas se volvían más poderosos, asustando un poco a la heroína, pues el miedo de que algo le sucediera a su gatito solo iba creciendo cada vez más. Y ese sentimiento era mutuo.

-Estoy agotada- Exclamó Ladybug mientras tomaba asiento en la punta de la Torre Eiffel. Sus ojos se encontraron con el hermoso paisaje que ese lugar les ofrecía, era uno de sus lugares favoritos, pues ver a París segura y sin ninguna amenaza le sacaba una sonrisa. Sin embargo, una pequeña mueca de tristeza apareció en su rostro, notando como a cada segundo, la oscuridad iba cubriendo más a la ciudad.
-Lamento que no hayamos podido hacer todo lo que queríamos.- Dijo sin apartar sus zafiros de la linda vista.

Ladybug escuchó los pasos de Chat alejarse haciendo que esta pensara que se había enfadado por no combatir el akuma a tiempo; si lo hubiera hecho, probablemente ahorita estuvieran abrazados viendo una película.

Una brisa helada hizo presencia, provocando un pequeño temblor en su pequeño cuerpo. Con cada segundo que pasaba, la temperatura solo descendía cada vez más. Abrazó sus piernas con sus brazos para así poder darse un poco de calor. Como deseaba ser abrazada por ese gato para dejar de sentir frío. En ese momento volvió a escuchar pasos, solo que esta vez, se iban acercando a ella para luego ver a ese par de esmeraldas que tanto amaba.

-Ten Bogaboo, no quiero que te enfermes- Dijo colocando una manta sobre ella para cubrirla del frío. Se sentó a su lado pasando un brazo por el hombro de su amada para así atraerla hacia él besando su cabello.

-Pensé que te habías enojado- Dijo Ladybug cerrando sus ojos para así poder disfrutar de las pequeñas caricias que él le regalaba.

-No te culpes por eso My Lady, tenemos toda una vida para hacer todo lo que queramos. Además, no me importa el lugar o lo que estemos haciendo, con tal que estés conmigo es suficiente.-Habló Chat, abrazando fuertemente a la Catarina.

Esa noche era solo de ellos, diciéndose cuánto se aman en silencio, disfrutando de sus caricias, sus besos y la hermosa vista de su ciudad. Convirtieron una noche fría en la más cálida simplemente porque se encontraban juntos.

•Melodía de mi Vida• [OS Miraculous Ladybug]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora