"Desde aquí hasta allí" (Erwin X T/N) One Shot.

"Por un deseo fruto del egoísmo de los dos"

Cuando mis ojos se cerraron sólo pude pensar en mi padre y no te lo puedo negar. Aún si eres el amor de mi vida y luego de compartir tanto no te recordé en mis últimos momentos y siento tanto remordimiento que daría lo que fuera por verte de nuevo. Sin embargo tú, estás allá en la tierra y yo en el cielo, más te vale no apurarte y no seguirme. ¿Entendido? Es mi última orden.
Sr. Smith: Me alegra que hayas pensado en este anciano. Aunque creo que deberías haberle dado ésa orden mucho antes.
Erwin: A qué te refieres?
Sr Smith: Mira detrás tuyo.

Tú estabas ahí dormida, sobre el césped, con un vestido color violáceo. Te veías como un ángel pero no para su vista. Erwin se sobresaltó. No se veía feliz.

Abres tus ojos lentamente y te sorprendes al verlo, tanto que te levantas torpemente y  tan rápido como tus piernas te permiten, corres a abrazarlo, pero él te acaba rechazando.

Erwin: ¡¿Qué haces aquí?!
T/N: No lo sé...pero estoy feliz de verte...(tus lágrimas comienzan a caer, sin embargo aún no te acostumbras y tus piernas falsean, cuando vas a caer de rodillas él te sostiene, su abrazo se sentía tan frío que te dió un repelús, parecía no ser él, aquel hombre tan cálido que solía ser, ¿qué ocurrió? Es lo único que puedes pensar...)
Erwin:  no es momento de que estés aquí. Iré de inmediato a ver qué puedo hacer.
T/N: ¿ Por qué?. Quiero...estar contigo, un poco más...
Erwin: ¡No seas egoísta! .(Levanta la voz pero trata de calmarse). Se suponía que ibas a seguir mi camino, ¿no fue nuestra promesa? Descubrir los secretos de la humanidad. Aún hay muchas cosas que debes hacer...

Lo miras desconcertada. Él suspira, da media vuelta y se va. Nunca lo habías visto de esa manera.

Sr Smith: así que tú eres su esposa. Ven, ¿te puedes parar? Te llevaré a mi hogar para que descanses.
T/n: s-si. (Tratas de incorporarte). Disculpe, ¿Usted...es?
Sr Smith: soy su padre. Déjalo un rato sólo, se le pasará. (Con un gesto amable te lleva, sujetando tu brazo muy delicadamente)

Sin preguntar nada más, sigues al Sr Smith hasta su casa. Allí tomas una taza de té y te quedas observando el paisaje a través de la ventana, es todo muy hermoso, es un valle y no hay muchas casas alrededor. Algo llama tu atención, todo parece flotar sobre una nube y no recuerdas como llegaste allí o que pasó desde que salieron de expedición para recuperar las murallas.
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¿?: Así que lo que debes hacer para devolverla es... Aunque debes tener en cuenta que es contra las reglas y que acabarán castigandote si lo descubren, será mejor que lo hagas lo antes posible, trataré de cubrirte pero no prometo nada.
Erwin: será de gran ayuda. Ya sé que es contra las reglas pero debo hacerlo, ella no debería estar aquí. Y confío en que Hanji la recibirá, confío en que su cuerpo está en buenas manos.
¿?: Haz lo que quieras.
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Erwin vuelve a la casa, tú estás sentada en el sofá, aún confundida y algo triste. Tu no sabes por qué lo extrañabas tanto y por qué él no se veía feliz. ¿ Qué pasó? ¿qué hiciste mal?

Erwin: (se dirige a tí) sal un momento, debemos hablar.

¿Debemos hablar? Una frase tan trillado, pero lo suficientemente poderosa para hacerte dudar acerca de qué querría hablar. Sin más opciones, sales de la casa y vas con él.

T/n: estuve pensando, pero...¿Qué está pasando? ¿Por qué eres tan frío?. Si se trata de la investigación sé que estamos cerca, creo saber la respuesta, sólo... Estamos a un paso! Cuando volvamos lo resolveremos, así que...no seas así...
Erwin: Veo que en verdad no entiendes nada. Yo de verdad te amo y lo haré aunque fuese lo último que haga cuando mi existencia desaparezca. Es por eso que debes irte cuanto antes.
T/n: ¿Quieres que continúe sola?¿Acaso una investigación te importa más que yo?
Erwin: no es la investigación, tu debes seguir viviendo. Cuánto más tiempo estés aquí más difícil será que vuelvas, cada segundo te materializarás más y no creo poder soltarte dos veces.
T/n: ¡No quiero irme! ¡Quiero estar a tu lado por siempre! ¡Lo habíamos prometido! ¿No es así?. Por favor... Aunque sea una noche más.
Erwin: (luego de pensarlo un momento, se sonrie) está bien. Solo si me prometes que luego no te resistirás.

Asientes con la cabeza. Un sentimiento de paz recorre tu cuerpo. Sientes como cada segundo éste se acostumbra a estar aquí, como si nunca hubieras estado en otra parte.
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Cocinaron como la primera vez. Miraron las estrellas y él te contó una historia mientras te acurrucabas en su regazo. Sintiendote chiquita a cada palabra.
Erwin: había una vez, una princesa que solía escapar de su palacio. Un día descubre que sobre ella había un techo y quiso saber qué había más allá...
Encontró a su príncipe pero él muere dando su corazón para salvar a la humanidad mientras ella descubre que hay más cosas escapándose de lo que nuestras pupilas pudiesen imaginar...
Tu caes dormida... Al despertar es de día. Él ya está despierto y están en el mismo lugar de ayer, abrazados.

Erwin: ¿vamos?

No respondes, sabes lo que va a pasar. Él te carga en brazos y te lleva a lo que pudiera parecer un precipicio. No ves el fondo. Tienes miedo pero de algún modo sabes que está bien, porque aún estás viva y ésa es la prueba. Él te baja. Cruzan miradas, se besan como la primera vez, tomando tu cara entre sus grandes y cálidas manos, luego, bajando a tu cintura, llevandote hacia él como si fueras a desaparecer. Se separan y te empuja. Caes mientras ves su cara, su expresión, sus cejas, sus manos, su cuerpo entero. Al llorar tus lágrimas se convierten en lluvia y ésta te mece hasta caer en una cama que no recuerdas...