' Porque Apolo Lestrange no quería involucrarse con la magia oscura,
porque el joven Lestrange no era malo,
porque Harry Potter no fue la única persona que se sacrificó,
por eso y mucho más... '
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'LA ESPERANZA ES LO ÚLTIMO QUE SE PIERDE'
Cuando Apolo Lestrange por fin subió solo y apurado sus pertenencias al Hogwarts Express, pudo sentir por fin, luego de tres largos meses de vacaciones de verano, que una pequeña chispa de esperanza y emoción se encendía en él
Si había algo que Apolo detestara más que el verano, era pasar tiempo con su podrida familia, los aborrecía por completo, a ellos y a sus estúpidos ideales arcaicos que lo sacaban de sus casillas, pero aún así no era lo suficientemente valiente como para hacerles frente, era por eso que estaba agradecido más que nunca de que las clases en Hogwarts comenzaran de una vez por todas, por fin, el tan aclamado primero de septiembre había llegado, y ahora el rubio estaba feliz de estar en camino a su verdadero hogar
Aunque incluso en Hogwarts debía seguir ciertas reglas de sus padres, la pasaba mejor allí que en su propia casa, al menos estudiaba y podía verse con sus amigos
Ahora estaba sentado en el vagón de prefectos, había sido nombrado prefecto un par de semanas antes de comenzar el curso, cuando su carta con sus materiales para utilizar durante el año había llegado, aún recordaba cuán enojado había estado su primo Draco al ver que él, Apolo, le había "quitado" el tan preciado puesto. Lo bueno era, que sus padres estaban orgullosos de él y durante toda esa semana se le había hecho más fácil subsistir en la gigantesca y lúgubre mansión Lestrange
El vagón de prefectos era el más amplio y limpio del tren, algo que contentaba al rubio, pero su sonrisa se ensanchó aún más cuando vio quién era la prefecta de la casa Ravenclaw, así era, Rebecca Potter estaba ahí, luciendo su insignia de color plateado y azul con un notable orgullo; aunque no lo quisiera admitir -realmente ante nadie-, Apolo estaba atraído por Rebecca desde su tercer curso, y le había roto el corazón ver cómo había llorado la pelirroja cuando se enteró que el maniático de Sirius Black había entrado a la torre Gryffindor y había intentado matar a su hermano, Harry. A Apolo le parecía que Sirius Black era un hombre joven con mucho estilo y demasiado astuto e inteligente al haber escapado de Azkaban
El rubio de ojos azules paseó su mirada por el compartimento, los prefectos de Hufflepuff eran Ernie Macmillan y Hannah Abbott, no tenía problemas con ninguno de ellos, los prefectos de Gryffindor eran Hermione Granger y Ron Weasley, al joven Lestrange le sorprendió un poco ver que Harry Potter no era uno de los prefectos de la casa escarlata; no tenía problemas con Hermione, era agradable y habían intercambiado unas cuantas palabras en la biblioteca, sabía que cumplía años unos días después que él, era agradable, de Ron no podía decir exactamente lo mismo, se llevaban bien sí, pero le parecía que aveces, el pelirrojo era muy bruto. De Ravenclaw eran Rebecca Potter y Anthony Goldstein, ambos agradables y profundos, aunque Apolo jamás hablaba demasiado con Rebecca, se quedaba paralizado y temía hacer el ridículo frente a ella. Y bueno, de Slytherin eran él y su compañera Pansy Parkinson, aveces podía ser chillona pero si la conocías bien podías llegar a apreciarla y tomarle un poco de cariño
