Mi pequeña sirena

Aprender maneras

Por suerte, la oficina de Alphys no estaba lejos y Sans guio a Frisk por el primer corredor paralelo a la recepción. Queria  evitar a Papyrus esta vez, pero era para no perder el tiempo. Su hermano se tomaba las cosas demasiado a pecho.

"Más tarde vendremos con el" declaró Sans "¿Nunca has estado en un baile cierto? Paps podrá ayudarte con ciertas cosas que necesitarás saber"

"¿Y tú no sabes?"

"Heh, yo tampoco tengo idea de etiqueta, niña"

Podia ver a la chica reir con ganas, e incluso podía oírla en su mente como la primera vez que se rió del juego de palabras que le soltó cuando la conoció. Pero sabía bien que no era asi...

"Vamos" dijo haciendo seña en lo que tomaba el pomo de la puerta.

Sans abrió la puerta a un lugar oscuro y Frisk permaneció tras de él tomándolo del brazo.

Sans sonrió y golpeó con los nudillos la puerta.

"Hey, Al"

Sans paso la vista por el interior tratando de buscar la luz, pero luego de pensarlo mejor, prefirió dejar la bolsa sobre un mueble.

Vamos Al, ¿otra vez escondiéndote?

"Oye, voy a dejar esto aquí, creo que no hace falta decirte de parte de quién es"

Sans cerro la puerta y miro a Frisk quien parecía confundida.

"¿No vas a decirle...?" Dijo ella en señas.

"Descuida, yo creo que solo quiere estar tranquila. Ya la conocerás en el baile"

Alphys era algo tímida, y también alguien muy distraída, podía estar escondiéndose de ellos o bien se habría quedado dormida en el escritorio. En ambos casos, Sans conocía lo suficientemente bien el estrés para compadecerse de aquellos que pasarán por el con regularidad. Mejor dejarla descansar.

Al llegar a la recepción, el hermano de Sans estaba de brazos en la espalda imitando a los soldados de la entrada. Frisk quería saludarlo, pero Sans puso una mano frente a ella.

"Espera" dijo con una sonrisa llevándose un dedo a los dientes.

Sans se oculto con Frisk tras un pilar convenientemente ancho, y luego De espaldas apoyado en este, el esqueleto imitó la voz de Toriel.

"¡Sentados!" Gritó.

Los guardias movieron la cola y se sentaron en el piso sin moverse de sus lugares aún con las alabardas apuntando el cielo. Papyrus por su parte se puso nervioso, sus hombros se tensaron y este cayó al piso de tracero, juntando las piernas, intentando lucir lo más profesional posible mientras esperaba a que la supuesta reina pasara.

Sans le hiso una seña a Frisk para que la siguiera.

"Hey, Paps" Saludo guiñando una cuenca mientras salía de su escondite.

"¿Sans?" Giro la cabeza "¿Hermano?"

Los guardias gruñeron en molestia y volvieron a levantarse. Al verlos hacerlo, Papyrus miro con recelo a su hermano.

"Sans, sabes que te aprecio" Dijo levantándose con un ligero rubor en la cima de los huesos de sus mejillas "Pero imitar a la reina para hacer ensuciar mi traje es algo que no voy a tolerar, si quieres que-

Pero Papyrus se interrumpió a si mismo cuando vió salir a Frisk detras de uno de los pilares. Sans captó que su hermano no la había visto al llegar.

"¡Oh, Frisk que gran sorpresa!" El esqueleto se levantó limpiando su ropa con las manos para luego hacercarse a la altura de Frisk y sonreírle "Undyne te preparo bien para la ocasión ¿Verdad? Incluso te ha arreglado un poco el cabello enseñado. Te ves muy bien, ya pereces incluso más adecuada para la fiesta"