[ La Estancia Park ] ᴷᵒᵒᵏᵐⁱⁿ

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Jimin río ante la conversación con su amigo y noto que no tenía señal de nuevo, es algo a lo que debía acostumbrarse asique no podía quejarse.

Puso su teléfono a cargar ,bajo a la cocina, con su pijama ya puesto, su papa estaba en la esquina de la mesa de su no tan grande comedor, asique fue allí y noto como había tres platos en está.

- ¿Tendremos visitas? Me hubieras dicho así me pondría otra cosa - se quejó el menor.

Su padre negó lentamente y le sonrió - Pero Si te ves tan lindo así.. - Río - No tendremos una visita, ya que Jungkook es como mi segundo hijo.. - dijo el señor.

Mientras El mencionado ingresaba al comedor, con la olla en las manos.

- Ya veo...- fue lo único que respondió el joven , aunque le molestaba que su padre se refiera al otro chico como "su segundo hijo " el no tenía derecho a quejarse de algo, todo era culpa de su madre, cuando estos se divorciaron su padre hasta el día de la fecha no se volvió a casar, para jimin siempre fue extraño pero sabe que su papa lo ama, aunque solo se hablaran por teléfono muy poco, ya que su madre le prohibía absolutamente verse con el. 
Se podía sentir el cariño de el, su madre se volvió a casar luego de 5 años de estar sola, fundó una compañía , se convirtió en una mujer exitosa y fría.

Con el tiempo el amor madre e hijo se hizo más triste, Jimin vivía con niñeras hasta su adolescencia y su madre cada vez más ausente en su vida.

Luego de estar sola mucho tiempo, ella sólo volvió  a casa y anunció su nuevo matrimonio, esto al joven no le importó. Ambos padres estaban ausentes en su vida,  pero su madre lo intentaba  controlar cada vez que podía, y aunque Jimin siempre la complacio, esta vez  decidió que ya era suficiente..

Es hora de que Jimin vaya a la Universidad y se especialice en algo que en lo que pueda ser exitoso. Pero Éste chico tenía pensado en lo que quería ser y no era del agrado de su nueva familia.

Así que está aquí hasta que se le pase el "capricho", aunque el no se daría a torser tan fácil.

Los tres comían serenamente hasta que el padre corta con el silencio..

- Hoy hable con tu madre... - dice mientras seguía comiendo - Y no me dijo nada lindo... - bromeó un poco llevándose risas de los presentes.

- Es más gracioso que esperes algo lindo  de ella... - Río el menor, terminando de comer. - Estuvo delicioso... - dijo al aire.

- Lo hizo la cocinera antes de irse... - respondió Jungkook.

Y Jimin recordó que el único que vivía en la propiedad era el chico frente a el y sólo asintió.

- ¿No sabía que querías ser bailarín? - preguntó su padre tomando por sorpresa a ambos.

Jimin lo observó..- Hay muchas cosas que no sabes de mi... - dijo en un tono seco levantándose de su silla.. - Terminé, asi que tengan buenas noches, y papá... - suspiró - Buen viajé mañana.. - sonrió apenas y sin más se marcho a su habitación. 

El hombre mayor suspiro y terminó su comida... - No deberia dejar que le hable así.. - dijo Jungkook levantando los platos de la mesa.

Seungwoo rio suave - Está de más decir que tiene razón... - jungkook dejó aquellos trastes en su lugar y volvió a la mesa.. - Jimin tuvo que pasar muchas cosas solo, y creo que nunca se reveló a nada ni nadie - volvió a sonreir - Asi qué  estoy feliz que gracias a su rebeldía está aquí conmigo.... - suspiro.- Si tan solo no me tuviera que ir mañana... - negó con la cabeza.

-¿Rebeldía? - preguntó Jungkook confundido.

- ¡Oh! Si... - río el mayor - Como escuchaste, Jimin quiere ser bailarín pero su madre no quiere y entonces ella decidió que vivirá conmigo hasta que su capricho por el baile se le pase.. - hablo el mayor.

- ¿ Y usted que opina? Digo.. ¿Sobre que el baile? - preguntó jungkook.

- Pienso que si la gente hiciera lo que ama,  habría más personas felices... -sonrio el mayor levantándose de la mesa.  - Entonces... Jungkookie te dejaré a cargo estos días, ¿Cuidaras de mi hijo? - pregunto.

- ¡Oh! Claro! Dejemelo todo a mi señor.. - respondió jungkook con una sonrisa.

El hombre mayor le sonrió y se despidió de el subiendo a su habitación mientras jungkook volvía a su pequeña cabaña.

- Entonces... ¿estas aquí por obligación? , esté no es lugar para un chico con ganas de bailar... - río mientras se  acostaba en su cama - Veremos que tanto puedes soportarlo... - sonrió de lado. 

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