Capítulo 4.

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Yuk Hei miraba con cierto interés la vitrina de una tienda de peluches, intentando decidirse en entrar o no, aunque estaba seguro de que a Hye iba a encantarle que le regalara uno de esos, y sentía que el regalo para su hermana estaba resuelto, aunque todavía no terminaba de encontrar algo que pudiera gustarle a sus padres, tal vez ir a una tienda de recuerdos serviría, aunque la idea no terminaba de gustarle.

Se vio sorprendido cuando fue halado del brazo y una bofetada cayó sobre su mejilla, dejándolo aturdido por unos segundos antes de intentar entender lo que sucedía, hasta que vio al hombre frente a él, que parecía ser una pesadilla lo que estaba viviendo, y más si tenía a Yuan mirándolo furioso cuando él lo único que estaba haciendo era buscar un regalo para su familia.

—¿Qué mierda te pasa?, ¿por qué me...?

—¡¿Ahora también vas a fingir que no sabes nada?! ¡¿Qué no eres su amante?!

Yuk Hei frunció el ceño, confundido, sí, no sabía nada, no pensó que mientras estuviera en el centro comercial iba a encontrarse con Yuan, ni que éste lo golpearía, y no sabía la razón, lo único en lo que pudo pensar fue en lo sucedido hace más de un mes en la casa de sus padres, cuando le fue mostrada una fotografía que todavía no sabía de dónde salió.

—No sé de qué hab...

—¡Mentiroso!

—¡Es suficiente, Yuan! —escuchó que gritaron detrás de él.

Entonces lo notó, porque Tian Yu también estaba ahí, sólo que él no lo había visto, teniendo que tomarse un momento para asimilar lo que estaba pasando.

—¡¿Todavía piensas negar las cosas?! ¡¿Cómo se supone que permita que mi esposo se vea con su amante?! ¡Y lo trajiste a China!

Yuk Hei rodó los ojos y bufó, no sabía cómo era que Yuan sacaba conclusiones demasiado rápido, pero no estaba más que equivocado, él no había ido a China por verse con Tian Yu, sino que fue hasta ahí como unas pequeñas vacaciones en las que visitaría a sus familia y amigos, incluso estaba quedándose en la casa de su tío Jin Ki, si hubiera ido ahí siendo el amante de otra persona habría intentado que nadie se enterara, pero al parecer eso era algo que Xiao no podía entender, que al final sólo era él creándose historias.

—¡¿Cuántas veces voy a tener que repetirte esto?! ¡Nosotros ya no estamos casados, si quiero salir con alguien será mi problema! ¡Deja de seguirme a todos lados!

—Tú... tú...

Yuk Hei apretó los labios viendo como más personas parecían prestar atención a lo que estaba sucediendo con la pareja, y aunque un lado de él le decía que lo mejor era que se retirara antes de que lo siguieran involucrando algo en lo que no tenía nada que ver, también tenía su lado un poco más tonto y vengativo, que lo hizo actuar de la manera que sabía era un error, que tal vez atraería más miradas sobre ellos y que los juzgaran, pero él sabía lo que era estar en el lugar de Tian Yu, a él Jung Woo tampoco lo dejaba en paz.

—Ya, cariño —dijo acercándose a Tian Yu —déjalo, vamos de aquí —pasó un brazo por sus hombros.

—¡Tú, maldito mocoso! ¡Te voy a...!

Yuan no pudo acercarse como quería porque fue sostenido de la cintura por un hombre que Yuk Hei no sabía de dónde salió, pero por la manera en como le habló al oído a Xiao creía que se conocían, incluso volvió su mirada a Tian Yu, quien sólo parecía afectado pero no afectado por la cercanía de su ex y el otro sujeto.

Yuk Hei sabía que a veces podía ser un poco impulsivo, y ya había sido golpeado dos veces por Yuan y no se lo había perdonado, por eso sonrió de lado y se olvidó de las personas a su alrededor que parecían juzgar la escena, sino tomó la barbilla de Tian Yu y lo besó, fue sólo un roce de labios, pero él disfrutó escuchar los gritos enfurecidos de Xiao.

Tian Yu parecía sorprendido cuando él se alejó de sus labios, y no le dio tiempo de pensar las cosas o dejar que las explicara, sino que se abrazó a su brazo y lo haló para que se alejaran del histérico de Yuan, del que estaba seguro que si no los había seguido era porque todavía el otro hombre lo seguía sosteniendo.

—¡Ya, mocoso! —gritó Tian Yu soltándose cuando estuvieron lo suficiente lejos —¿qué mierda haces?

—Me vengaba de tu esposo por golpearme —se encogió de hombros y pasó el dorso de su mano sobre sus labios, limpiándolos —no sé la razón de que sea llorón, ni siquiera besas bien.

—Sin embargo es la segunda vez que me besas, mocoso...

Yuk Hei abrió su boca pero ninguna palabra salió de sus labios, apretándolos entre sí poco después porque entendía a lo que estaba refiriéndose, aunque él se negaba a creer que fue quien lo besó la primera vez, es decir, todo lo que había era una fotografía, Tian Yu podía sólo estar mintiendo.

—Dile a tu esposo que se mantenga alejado de mí.

—Ya no es mi esposo...

—No me lo digas a mí, díselo a él, a mí me da igual.

Yuk Hei metió las manos en los bolsillos de su chaqueta, girándose con intenciones de irse, tal vez debería regresar otro día para comprar los regalos para su familia, después de todo, todavía le quedaba unos días más antes de tener que regresar.

—Oye, mocoso —llamó Tian Yu —¿Quieres ir por un café?

Se giró con intenciones de rechazar la invitación, pero cuando sus ojos cayeron sobre la pareja que estaba cerca, y uno de ellos queriendo matarlo con la mirada, una sonrisa apareció en sus labios, y regresó sobre sus pasos dando unos pequeños saltitos antes de enganchar su brazo en el Tian Yu, viendo la sorpresa de él.

—Tu loco no esposo está ahí, se lo merece por golpearme —sonrió amplio —quiero un café helado.

Lo arrastró a la zona de comida en el centro comercial, sí, ahora creía que mínimo Tian Yu le debía un café por él haber tenido que soportar dos golpes que no le correspondían, lo cobraría de esa manera.

Todavía no podía creer que a pesar de lo grande que era China, la ciudad en la que su familia vivía al parecer era demasiado pequeña si en su viaje había tenido que encontrarse con el socio de su padre y el loco ex esposo de éste, sólo esperaba que no se repitiera.

***

Yuk Hei sonrió en el momento que vio a su papá Min Ho esperándolo luego de que viajara del avión, y sin pensarlo demasiado corrió hasta él, abrazándolo fuerte y siendo correspondido de la misma manera, mientras podía oír su risa feliz.

—Papi, te extrañé —dijo con una voz consentida y luego frunció el ceño —¿en dónde está papá Taemin y Hye?, dijeron que iban a venir todos a recogerme.

Min Ho rió pasando su brazo por los hombros de su hijo, que a diferencia de cuando lo conoció, ya había crecido lo suficiente como para ser de su estatura, y a veces parecía que hasta era un poquito más alto que él, pero sólo era en lo físico, porque él seguía viéndolo como un niño consentido y a veces un poquito mentiroso.

—Taemin fue a comprarle golosinas a Hye.

Refunfuñó un poquito consentido, aunque se olvidó de eso cuando minutos después tuvo a su hermana abrazada a su pierna y a su papi Taemin apretándolo fuerte entre sus brazos, porque a pesar de que sólo se había ido por dos semanas a China, sus padres lo hacían parecer que fueron años, y a él no le enojaba recibir toda la atención y cariño de su familia.

—¿Cómo te fue en China? —preguntó Taemin.

—China es como Las Vegas, lo que sucedió en China se queda en China —sonrió al ver que sus padres parecían no entenderlo —Tío Jin Ki les envía muchos saludos, en realidad todos les envían saludos, pero tío Jin Ki envió unas esencias que dijo que debíamos tener...

Yuk Hei habló de todo lo relacionado con su familia, y algunas cosas de las veces que visitó a sus amigos, porque él se había tomado muy en serio aquel "lo que sucedió en China se queda en China" y más si eso incluía a Tian Yu en los hechos.

InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora