Capitulo 9 Frente A Frente

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Hay algo más terrible que el calor de la ciudad?
Lo que más extrañaba de mí hermoso Luján era poder sentarme bajo un árbol en verano y sentir el viento en mi cara frente al río.
Extrañaba tanto mi pueblo. Muchas veces me prohibía pensar en eso porque ese pensamiento me llevaba a pensar en el.
Tampoco le quería preguntar mucho a Malena.  Me conto dos cosas: -Si, como puedes vivir sin mi es para vos, Me dijo Luciano que si  me comunicaba con vos alguna vez te lo dijera, y lo otro fue cuando  iba a cantar frente al papa. Lo primero fue una puñalada. lo segundo fue algo muy feliz para mi.
Imaginaba su alegría, su orgullo y emoción. Lo vi por la tele. Que momento único para el y para sus padres.
Otra vez lo vi cantando "mi canción" en vivo en el canal cm. Estaba tan lindo con esa camisa bordó brillante y esos ojos color miel que siempre había amado.
Estaba cumpliendo tantos sueños! Cosas que yo sabía que lo hacían feliz
Aunque muchas veces Intentaba no saber, no preguntar.
Aunque un día me encontré con el frente de mi casa todo empapelado con la promoción de un nuevo CD... Soy tuyo y ni hablar de los gran rex.

No estaba en mis planes inmediatos volver a Luján. No sabía si estaba preparada para pisar de nuevo ese lugar.
Obviamente pensaba ir cuando Luciano no estuviese allí.
Mi terapeuta me dijo que uno de los primeros pasos para sanar iba a ser enfrentar las cosas antes que huir.

Mis planes cambiaron cuando recibí una llamada de mi madre, mi padre había sufrido un ataque cardíaco. Y si bien estaba estabilizado y consciente, estaba delicado.
Tenía que ir...
Mis temores más profundos afloraron. Ese no era el plan. Pero no podía hacerme la tonta y no ir. Mas allá de no haber sido los mejores, eran mis padres y los quería.

Le conté a gaston lo que me había pasado. No, no era mi novio por si lo pensaron. Solo era mi amigo. No porque el no lo hubiese intentado pero siempre entendió que mi corazón estaba cerrado a todo tipo de sentimiento. Así que se conformó con solo ser mi amigo aunque dentro suyo guardará la esperanza de que algún día me olvidara de Luciano y poder ser más para mí.

- llevas todo no? - me pregunto ayudándome a cerrar la valija
- si. Documentos, el pasaje, ropa- empecé a enumerar.
- estas nerviosa?
- demasiado.
- no quiero que te pongas peor, pero pensaste en que vas a hacer si te lo cruzas? - me pregunto frunciendo el ceño
- te soy sincera? No. No quiero pensar en eso. Tampoco sé cómo voy a reaccionar o como reaccione el. Paso mucho tiempo desde que me fui. Supongo que el continuo con su vida como pensé que iba a pasar. Pero no quiero hablar mas de esto, me duele la panza sino.

Nadie sabía que iba a volver, excepto mi mamá.
Gaston me acompañó en un taxi a la terminal y me ayudó con el bolso
- bueno nena (me decía así porque el era un par de años mayor que yo) que  tengas buen viaje y ojala que vuelvas- dijo riendo
Yo sonreí, lo abrace y subí al micro

Llegué a la terminal y tomé un remis hasta mi casa.
Le pagué al chófer y el me ayudo a bajar el bolso.
Entre a casa y ahí estaba mi madre que me dio un corto abrazo.
Visite a mi padre en el hospital. Estaba bien, pero seguía delicado en terapia intermedia. Si todo seguía como estaba lo podían pasar a sala común en algunos días

Llame a Male para decirle que estaba en casa. Vino corriendo prácticamente. Estuvimos horas charlando sobre lo que los había pasado en todo este tiempo.
Si, hablábamos por teléfono pero no era lo mismo.
- Male, necesito ir a ver a Angel y Angela. No tenes idea si Luciano esta en su casa
- mmm amiga, realmente no se- dijo malena encogiendo los hombros- Luciano desde poco tiempo despues que te fuiste se fue volviendo cada vez más hermetico. Nadie sabe dónde va ni cuando.  Yo sabía que estaba en Neuquén pero no se cuando vuelve.
- me la voy a tener que jugar e ir- dije rogando que todavía estuviese de viaje.

Llegue a la reja de los pereyra. Golpee las manos. En todo este tiempo no habían puesto timbre - pensé y sonreí.
A lo lejos del fondo veo venir a Angela.
-Si? - dijo
-Soy yo angela- le respondi
Abrió los ojos grandes y se tapó la boca
- hijita!! Pero si sos vos! - dijo apresurandose a abrir la puerta.
Pase y me abrazo fuerte, me invitó a entrar y nos sentamos en el patio de  atrás a tomar mate
-pero como te fuiste así sin avisar? - preguntó ofreciéndome un mate- Lo que nos preocupamos con Angel- dijo. con cara de angustia--yo fui a hablar con tu mamá y ella me dijo que te fuiste a la capital.
- perdóneme Angela por no despedirme , pero me tenía que ir.
- yo se hija, nunca me quise meter, pero el que sufrió fue Luchito- recordó con la mirada triste
- lo sé y le pido perdón por eso también- le dije avergonzada- el... esta? Pregunte con algo de temor
- noo, para nada. Esta de viaje, como siempre. Volvía mañana me parece. Yo ya ni se porque va y viene tanto- dijo resignada 
Respire aliviada 
- Qué te trajo de nuevo para aca?- me pregunto
Le conté lo de mi papá, sobre mi carrera y mi vida en la capital- me alegro que te haya ido tan bien. Te vas a quedar a comer no? - me dijo con los ojos llenos de ilusión.
- si Angela, me quedo- le respondí al instante.
La acompañe a hacer los mandados como cuando era chica y Luciano no quería ir.
La ayude a preparar la cena. Angel llegó a la tardecita. Se puso tan feliz como ella de verme. Me llenaba el alma que mis papas del corazón no estuviesen enojados conmigo por lo que hice.
Comimos y charlamos. Parecía que el tiempo no había pasado.

Nunca muere un gran amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora