Me equivoqué (KageHina)

Capitulo 2

[Narra Kageyama]

No se que paso. Todo fue muy rápido. Hinata estaba como siempre, pero después se declaró. Al día siguiente no me dirigió la palabra cuando pasó por mi lado, tampoco me miró a los ojos.

No creía que Hinata pensaba en mi de esa forma. Me sorprendió. Pero como no sentía lo mismo por él, lo rechacé.

Cuando salió corriendo después de que lo rechazara, me quedé unos segundos sin moverme de donde estaba. No sabía si era una pesadilla o si era real.

Esto afectaría nuestros remates rápidos. Y eso no era muy conveniente. Mientras iba a mi casa, pensé "¿como podré arreglar esto?" Las cosas no podían quedar así. Pero no se me da bien hablar con las personas, y menos de sentimientos.

Sin darme cuenta llegue a mi casa. Yo vivo solo, ya que quise ir a la preparatoria de Karasuno, me vine a vivir yo solo.

Prepare la cena, cene y después de un baño, salí a dar una vuelta.

El cielo estaba despejado, las estrellas brillaban, y una luna azulina se dejaba ver. Observe aquel espectáculo durante unos instantes. Y me pregunte, "¿habrá alguien más observando la luna azul que se alza en el cielo?"

Una brisa suave me acarició, y, sin darme cuenta, pensé en Hinata. Aquel pequeño animal había fastidiado nuestra amistad. Al principio me enfadé, pero luego recordé como salió corriendo después de que lo rechazara. Me dio un poco de pena. Casi se me escapa una lágrima.

Aparte la mirada de la preciosa luna, y me dirigí  mi casa, un poco deprimido.

Al llegar a mi casa me heche en la cama. Y me quedé dormido.

El despertador me despertó con un sonido irritante. Lo apagué y me levanté, aún medio dormido. Me vestí y después de hacer mi cama, bajé a la sala. No tenía hambre, así que no desayune, coji mi mochila y salí de mi casa para ir a la preparatoria.

En el camino iba sumergido en mis pensamientos, hasta que le vi. Paso corriendo a mi lado. Me detuve. Suponí que me estaba evitando, por que ayer lo rechacé. Así que no lo seguí. Y retomando el dilema que ayer me planteaba, empecé a pensar en una manera de poder suavizar las cosas entre nosotros. Solo se me ocurría una idea, presentar a alguien a Hinata, para que se desinteresara un poco de mi. Me pareció un poco inapropiado, así que lo dejé para el final, por si no se me ocurría nada más.

Después de unos cuantos minutos reflexionando, llegue a la preparatoria. Entre en mi clase y me senté en mi sitio. Yo no tenía muchos amigos, solo los del club de voleibol. Además, las chicas siempre andaban molestándome. Yo lo único que quería era dormir.

Cruce mis brazos sobre la mesa y apoyé mi cabeza, esperando que la clase empezara.

Me pareció que las clases pasaron más lento de lo habitual. Y para colmo, antes de comer nos tocaban matemáticas.  No me interesaba la clase así que, volviendo a cruzar mis brazos por encima de la mesa, me quedé dormido.

La hora de comer llegó, me despertó el ruido de las personas hablando y gritando. Me enfadé, y les mandé una mirada de odio por haberme despertado. Enseguida se callaron, pero yo ya no podía dormir. Salí de la clase y me dirigí las puertas del gimnasio, que es donde solíamos comer Hinata y yo.

Pero claro, él no se encontraba allí. Yo simplemente me senté y empecé a comer mi comida. Ni siquiera me molesté en ir a buscar a ese pequeño animal.

Termine de almorzar, y aun me quedaban unos 15 minutos para que las clases comenzaran. Mire al sitio en donde Hinata comía, pensando que estaría vacío, pero me sorprendió ver a un pajarito a mi lado.

El pájaro era de color negro, con manchas naranjas y azules en sus alas, y su pico era de color amarillo. El pájaro de hacer caba a mi dando unos pequeños saltitos.

Me quedé viéndolo. Últimamente veía cosas que eran increíbles. Observe su belleza hasta que me di cuenta de la hora. Faltaban 7 minutos para que las clases empezaran, y no quería llegar tarde. Me levanté y me fui. Antes de irme, mire una vez más al pequeño pájaro. Pero él ya se había esfumado. Entre en mi salón, me senté en mi sitio y entonces entro el profesor de historia, se llamaba Shikaku, Shikaku Smith. Me caía fatal, no se por que, quizá por que trataba a todo el mundo bien. El señor Smith era joven, tenía unos 28 años, muchas de sus alumnas estaban enamoradas de él. Y le caía extrañamente bien a Hinata.

Después de una hora de tortura con el señor Smith, tocaba inglés, el inglés tampoco me gustaba, pero era por que no entendía una mierda.

Por fin, las clases habían terminado. Por fin podría jugar voleibol. Pero, entonces me di cuenta, Hinata me evitaba, lo cual es malo por que no podríamos hacer remates rápidos. Me quedé de piedra.

- '¿¡PERO QUIEN NECESITA A ESE IDIOTA?! ¡PUEDO JUGAR VOLEIBOL SIN EL!' - Pensé. Y me irrite un poco.

Recogí mis cosas y me cambié. Después entré al gimnasio, pero Hinata aún no había llegado. '¿¡Acaso ese idiota será tan cobarde de no venir?!', pensé. Pero no fue así, al cabo de un rato apareció en la cancha. Lo mire, y el me miró, pero, rápidamente desvió su mirada. En aquel pequeño instante, cuando vi su mirada, vi depresión. Aunque él sonreía, no sonreía como siempre. Evitaba el contacto conmigo. Tampoco se portaba normal con los demás. Estaba más apagado. Además, no nos quedamos más tiempo entrenando, como solíamos hacer. Eso confirmó que me estaba evitando. Todos lo sabían.

Cuando Hinata se fue, empezaron a preguntarme si nos habíamos peleado o algo así. Yo no les quise decir que se me declaró. A si que solo dije que habíamos tenido una especie de problema.

Ya de camino a mi casa, estaba más preocupado. No quería estresarle, así que decidí dejarle espacio.

El camino a mi casa se me hizo más largo de lo habitual. No podía dejar de pensar en aquel pequeño bastardo.

Eché a correr para llegar lo antes posible a casa, y cuando llegué, no tenía ganas de nada. Me eché en el sofá, estaba más cansado de lo normal. Encendí la televisión, y me comí las sobras del otro día. Me tumbé de nuevo en el sofá y caí en manos de morfeo.

HEY!!
AQUÍ TENEIS EL SEGUNDO CAPITULO DE 'ME EQUIVOQUÉ'●
ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO☆