¡¿Es en serio?! ¡¿Volví al pasado?!

6. Curiosos, Intrigados y Preguntones

Antes de empezar, quiero aclarar que el mundo de Harry Potter no me pertenece. Yo solo juego con los personajes. NO se aceptan adaptaciones de esta historia, NO al plagio. Esta historia tambien la puedes encontrar en Potterfics, y próximamente Fanfiction.

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Número 12 de Grimmauld Place

   Comedor

Después de que Harry y Dumbledore salieran del lugar, ante la mirada curiosa o inquietante de sus habitantes, el comedor se había sumido en un corto silencio, después de segundos en silencio todos reaccionaron y retomaron sus actividades, fingiendo que no era preocupante el hecho de que el Líder de la Orden quisiera hablar con el azabache justo después de que este mismo decidiera que era mejor sacarlo de casa de sus tíos, contrariando sus palabras y decisiones pasadas.

Pero claro que el disimulo de curiosidad no fue adoptado exactamente por todos, pues las dos personas restantes del trío que quedaban en el comedor no tardaron en juntar un poco sus cabezas y comenzar a murmurar.

— ¿Qué crees que quiera con el? -fue la primera pregunta que lanzó el menor de los Weasley a su castaña amiga-

— No lo se, se que es poco lo que he visto al Profesor Dumbledore, pero lo siento más misterioso que antes, ¿Crees que tenga que ver con la llegada de Harry al cuartel? -la cara de la muchacha se frunció en un leve ceño entre sus cejas, demostrando su preocupación-

— Puede ser...tal vez solo debamos esperar que Harry nos lo cuente cuando volvamos arriba

La castaña estuvo apunto de volver a hablar, pero se detuvo a media palabra en cuando su mirada se desvió por encima del hombro de su Ron; Dumbledore había vuelto a aparecer por el pasillo, haciéndole fruncir el ceño cuando no encontró a Harry con el, gesto que no pasó desapercibido por el pelirrojo, que giró para mirar hacia donde veía la castaña, imitando el gesto de su amiga al ver al Profesor solo.

El anciano director no se inmuto por las miradas extrañadas de todos, y con su siempre tranquila mirada, se dirigió hacia el heredero de los Black.

— Bueno Sirius, si fueras tan amable -Albus hizo un gesto de cabeza hacia el pasillo, indicando al ojigris que le siguiera, sin esperar respuesta el anciano director salió de nuevo del comedor-

Por segunda ocasión en menos de 10 minutos, Dumbledore se las había arreglado para dejar todo el comedor en completo silencio. Sirius aun sintiéndose algo perdido, no tardó en seguir al director fuera del comedor, lejos de las miradas (que ya comenzaba a sentir sobre su nuca) de todos.

El pelinegro no tardó en alcanzar al profesor, que lo esperaba en el pasillo, moderadamente alejado del comedor.

— ¿Por qué no vamos al salón, Dumbledore? -pregunto algo confundido, tratando de tener un tono de voz bajo-

— Me temo que el salón por ahora está ocupado, Sirius, tendremos que hablar aquí

— ¿Harry? -respondió algo dudoso el ojigris-

El anciano solo se dedicó a asentir, sin dar más explicaciones del tema. Entonces decidió que era mejor comenzar a hablar de los asuntos que había acordado con el futurista.

— Bien Sirius, la razón por la que te he llamado es porque tengo algunos asuntos que me gustaría que se resolvieran lo antes posible, y me temo que eres el único que los puede llevar a cabo, mucho me temo que no te va a agradar nada esta tarea, pero tienes que hacer tu mayor esfuerzo. Porque recuerda Sirius, que todo lo hacemos aquí es por el bien del mundo mágico, por el bien de Harry...