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Han Pasado Años

Han pasado años, años desde Garu cumplió diecinueve años, años desde que Pucca cumplió la misma edad que su amado.
Años también desde que Pucca rompió su voto de silencio, si han pasado años y muy largos.

Ching, la mejor amiga de Pucca fue a verla al restaurante.

- Hola, vengo a ver a Pucca - dijo tan alegre como siempre

- Hola Ching, Pucca esta en su cuarto - aclaro Ho

- Gracias Ho - sonrió y se dirigió a la habitación de pucca, tocó la puerta y Pucca abrió

- ¡Hola! - dijo con esa sonrisa que la destaca siempre y la abrazó

- ¿Como estas Pucca? - preguntó luego del abrazo y se sentó en la cama.

- Bien... - dijo insegura

- Hmmm... Si claro.. ¿Que pasa? - pregunto Ching preocupada

- Nada - y sonrío

- Pucca... Sabes que soy tu amiga..
No termino su frase que Linguini interrumpió abriendo la puerta.

- Perdón por molestar.. Pucca hay muchos pedidos y tu eres muy rápidas para entregarlos.... ¿puedes? 

- ¿Que hay que de Dada?

- Tksssss..... Ya sabes..... Es... Complicado.. - y sonrió nervioso

- Claro, perdón Ching - y sonrió con esa sonrisa hermosa que ilumina toda la habitación.

- No hay problema, hablamos luego, te veo al rato pucca - las amigas se despidieron con un gran abrazo como siempre y Pucca comenzó su trabajo.
Se subió a su moto y comenzó a entregar los pedidos, pero había uno que la ponía anciosa, el pedido de Garu.
Habían pasado años desde que no se hablaban, bueno si lo hacían a su manera, que era correr por todo Sooga.
Auqnue con el tiempo Pucca fue más madura y dejó de perseguirlo por todos lados, eso confundía a Garu, ya que siempre lo seguio y ahora paró, pero mejor para el, por fin estaba en paz.
Al llegar a la casa de Garu tocó la puerta y espero unos minutos, Garu abrió la puerta agarro los fideos y espero a que Pucca se lanzará hacia a él, pero no, ella solo sonrió y se subió a su moto.
Garu suspiro y se metió a su casa aliviado pero confundido.