✅1. Drama, Amor y Lágrimas [Editando]

Prólogo

EMILY

Sinceramente no sé cómo empezar. O por donde hacerlo. Lo que si se es que nada en esta vida es totalmente seguro. Ni siquiera el hecho de que tus padres sean tus verdaderos padres. Suena extraño, y hasta cruel, pero siempre existe esa posibilidad, ¿no creen? Por más mínima que sea existe.

Iniciaré presentándome: mi nombre es Emily Mendoza, tengo 18 años, estudio Biología en la universidad del Atlántico, vivía con mis padres y mi hermano en Barranquilla, tengo a mis amigos, me va bien en clases, económicamente no estamos muy bien posicionados, pero sabemos manejar lo que tenemos, así que no nos sobraba, pero tampoco nos faltaba. Podría decirse que, vivíamos bien, no cómodos, pero si bien. Pero como todo ser humano, a veces me imaginaba que podría pasar si nos ganáramos la lotería, o que llegara una herencia de algún familiar lejano, cosas así. Pero jamás se me paso por la cabeza algo como esto, ni en mis peores pesadillas.

Porque ojalá, todo fuese solo eso, una pesadilla.

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JONATHAN

Espero no crean que estoy loco o algo por el estilo, pero todo lo que ha pasado en este último año ha sido muy emocionante. ¡De verdad!

Para que entiendan mejor les explicaré: mi nombre es Jonathan Montiel, soy el hijo mayor de una pareja de exitosos empresarios, dueños de una cadena de restaurantes muy reconocida en la ciudad y que, sin presumir, pronto lo será a nivel nacional. Tengo 19 años, estudio administración en la universidad del norte, porque como ha de esperarse del primogénito, algún día me haré cargo del negocio familiar. La vida para mi había sido fácil. Tenía dinero, educación, buena relación con mis padres, mi hermano y amigos, pero siempre supe qué hacía falta un poco de emoción. Deseaba que pasara algo, cualquier cosa que ocupara ese vacío que sentía.

Y se cumplió. No como lo esperaba, sino mucho peor, como cuando te caes de la bicicleta mientras bajas una larga pendiente: te gusta la sensación de la brisa en tu rostro, te llena de energía, pero no esperabas caer y mucho menos que doliera tanto.