Jumin avanzaba con paso uniforme por los pasillos del enorme edificio de Hong Kong, junto con Elisa, y su asistente, Min-he. Jumin tenía una asistente que lo acompañaba en sus viajes, que coordinaba todo con la asistente general que estaba en C&R. A pesar de los excelentes colaboradores que tenía, el tener a su mano derecha en el edificio era más importante que lo acompañara en sus negocios. Elisa no tenía la misma opinión, llevando a todos los lugares a su asistente, y además aprovechando las cualidades de la chica: sabía hablar más de 25 idiomas.
- Luego de esta reunión, tiene un almuerzo de negocios junto con la CEO Huang. – le dijo la asistente Min-he a Jumin.
- Bueno, eso significará que nos vemos en la cena. – dijo Elisa, con una sonrisa a Jumin.
- Por supuesto. – respondió él.
En ese momento, el CEO Liu se acercó a Jumin para hablarle de un par de cosas, mientras Min-he miraba apresuradamente el reloj, mientras coordinaba el auto que los esperaba fuera del edificio. El chofer de auto insistía en irse, y Min-he debía ir a detenerlo o su trabajo peligraría. El señor Han no podía llegar tarde a esa reunión. Sin embargo, había un problema: ella tenía el celular de Jumin.
- ¿Sucede algo? – le preguntó Elisa, viendo la complicación en sus ojos. Min-he le contó todo el problema.
- Además, la señora Han ha estado llamando insistentemente, pero no he podido interrumpir la reunión para decirle. – dijo la asistente, con nerviosismo.
- No te preocupes, déjamelo, yo puedo esperarlo... y además, le diré lo de la señora Han. – dijo Elisa, sonriendo, aunque terminó la frase con un poco de aprehensión. La asistente la miró, y aceptó inmediatamente. Min-he llevaba bastantes años trabajando en C&R, incluso esperaba que a ella le dieran el cargo de Asistente General, en vez que contrataran a alguien nuevo. Sin embargo, Jumin le había explicado que sus funciones eran muy valiosas ahí donde estaba. Ella conocía bastante bien a Elisa, y el tipo de relación que tenía con Jumin, así que no dudó ni un segundo en entregarle el celular.
- Muy bien. – dijo ella, y luego se dirigió al ascensor a toda prisa, en la búsqueda del chofer.
Elisa tenía el celular en sus manos. Llamó con un movimiento de cabeza a su asistente que la esperaba. Su asistente no sabía 25 idiomas solo porque sí, ni tampoco la había contratado exclusivamente por eso. Ella era una exagente de la CIA Francesa, y necesitaba tener a alguien como ella cerca. Elisa le pasó el celular a su asistente, Isabelle.
- Bloquea todo lo que no sea de la empresa, por estos tres días. – dijo Elisa, mientras Isabelle asentía.
Tomó el celular y en un par de segundos borró las llamadas de Crystal, además de los mensajes, desvió sus llamadas, la bloqueó de diversas RR.SS y dejó imposibilitado al celular de contactarse con Crystal, y con todos los contactos que no estaban asociados a la empresa: Un número desconocido pero recurrente, Yoosung Kim, Simone, Jaehee Kang, Saeran Choi, Saeyoung Choi. Isabelle arqueó una ceja al ver estos últimos nombres, pero cumplió con lo que le pidió su jefa. Jumin era tan ordenado y meticuloso que tenía sus contactos de la empresa separados de los contactos de la empresa con sus amigos u otros. Sin embargo, hubo una aplicación que llamó la atención unos segundos: la RFA. Evidentemente, no dijo nada al respecto, ya que su jefa lo principal por ahora es bloquear a la esposa de su amante, o al menos de quien pretendía que lo fuera. Isabelle le devolvió el celular a Elisa rápidamente.
- ¿Nos vamos? – preguntó Jumin, de pronto, parándose tras de ella. Elisa asintió, tratando de evitar sobresaltarse.
- Toma, tu asistente te dejó tu celular, ella bajó rápidamente. – dijo Elisa, entregándoselo de inmediato.
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De sudor y ternura «Mystic Messenger» [Jumin/MC] [Parte I]
Fanfic[Parte I] ¿Qué les sucedió a Jumin y su esposa, Crystal, luego de que se casaran? ¿La vida los dejará ser tan felices como ellos quieren? Historia repleta de intrigas, romance, drama, y por supuesto: la pasión desbordante de Jumin Han. Esta es la...