"𝐷𝐸𝐿 𝑂𝑇𝑅𝑂 𝐿𝐴𝐷𝑂 𝐷𝐸𝐿 𝑃𝑈𝐸𝑁𝑇𝐸"

IIII

Las horas pasan,al igual que los días, el chico rosa no a venido al castillo, ¿será que le caigo mal?, bueno, yo creo que si.

—¿Y si lo visito?

Me pregunté a mi mismo. ¿Seria buena idea?, si joder, lo es.

Salí de mi castillo y comencé a volar a la casa de este individuo culo lindo.

—Son las doce, debe de estar despierto.

Llegué a su balcón, en donde me convertí en su "Vante", comencé a emitir ruidos gatunos, pero nada, la luz no estaba prendida, ¿está durmiendo?, arañe la puerta de cristal, provocando sonidos desgarradores, de algún modo u otro, funcionó, las luces se prendieron, dejándome ver su silueta detrás de las cortinas.

—¿V-vante?

Su silueta comenzó a acercarse a la puerta, hasta que las cortinas se abrieron dejándome verlo.

—Oh, debe hacer frío, entra.

Abrió la puerta dejándome entrar. Me subí a la cama, mirándole.

—Pensé que habías muerto, ¡te busqué por todas partes!

Me gritó, mientras se sentaba enfrente de mi, me tomo en sus brazos y comenzó a llenarme de besos, y yo, yo pues me dejé besar.

—Han pasado tantas cosas, que no se por donde empezar.

Suspiro y me miro, dejándome sentado enfrente de él.

—Conocí a alguien, un hombre guapo, muy guapo, pero es un idiota de primera, ¡aparte asusta!, y no se, me da confianza y a la vez no.

Bueno, sigue sigue.

—Pero... es tan hermoso.

Suspiró, mientras que sus mejillas se volvían de color rojo. Su esencia salía de color rosado sin brillo, y dulce, pero a la vez amargo.

—El se acercó a mi, y me tomó por la cintura, y yo que loco, su aroma era tan varonil, de todo un hombre, y el era hermoso.

Si, si, me lo has repetido mil veces.

—Pero lo odio, es un idiota, ¡joder pero un idiota guapo!, es el hombre más hermoso que e visto.

¿Entonces si es homosexual?

—Me gustan los niños y las niñas, o no se, solo me gusta sentir amor por personas, pero yo creo que ese hyung, solo es atracción física, solo superficialmente.

Se quedó pensando. Yo salté de su cama y salí afuera de la puerta de su balcón, en no se dio cuenta.

Solté un viento fuerte viento, que azotó contra esa puerta, abriéndose de par en par, estaba en mi faceta humana. Cuando las puertas se abrieron, vi el chico rosa con la mano en el pecho, y sus ojos bien abiertos.

Su esencia, tenía un sabor amargo, pero su color era rosa, algo raro.

—Y-yo....

El se levantó rápido de la cama, a pasos rápidos, ya lo tenía contra la pared, temblando.

—¿Porque no has ido a mi castillo?

Sus palpitaciones estaban muy aceleradas, sentía como su pulsó iba rápido, al igual que su sangre, que viajaba más rápido hacia el cerebro para no desmayarse.

—M-mi ga-gato.....

Sus manos estaban echas puños, con mi mano izquierda, tome uno de sus puños y lo abrí, dejándome entrelazar estas.

—Oh, te esperé mucho tiempo chico rosa, tu y yo, hicimos un trato, ¿lo recuerdas?

—S-si....