Damian Wayne y Tú *Segunda Temporada*

Capítulo Nº 29: La carta...

En el capítulo anterior...

______ No puedo más...- dijo en un susurro.

...

Una hora habían pasado en la misma posición, la chica estaba destrozada y Max no sabía como consolarla o que hacer para que parara de llorar, ella le había contado lo que había sucedido cuando fue a buscar a Damian y en cuanto termino de contarlo el rubio furioso lo maldijo con todos los insultos posibles. La chica se ducho y cambio su ropa por una que estaba seca y le había traído una de las sirvientes de la casa, le prepararon una habitación junto a la de él que era donde se quedaría por ahora. Max estaba desesperado por no poder hacer nada para ayudarla por lo que decidió llamar a Melany, ella era la única amiga de ______ en la ciudad y quizás la única que podía hacer algo por ella.

Llamada...

Max- ¿Crees que puedas venir a mi casa?...- le pregunto cuando ella contesto, ya era de noche.

Melany- ¿Que sucedió?...- pregunto preocupada.

Max- Es ______... Esta terriblemente mal... Creo que ya has de saber algo de lo que sucedió...-

Melany- Si... Ella y Damian...-

Max- No menciones su nombre...-

Melany- ¿______ esta en tu casa?...-

Max- Si... Ven y te lo explico todo... Ademas de lo de ese idiota sucedió algo con sus padres...-

Melany- Voy para allá...- luego corto la llamada.

Fin de la llamada.

El chico fue a la habitación de la chica y toco la puerta, no recibió respuesta por lo que preocupado entro de todos modos, la chica estaba durmiendo abrazada a si misma, aun se podía ver la humedad en sus ojos, el suspiro y luego cerro la puerta.

...

Damian se encontraba en el departamento sentado en la sala. Por primera vez en la vida no sabía que hacer, estaba destrozado, las palabras de la chica y la forma en la que había terminado de él no dejaban de repetirse en su mente, se sentía malditamente culpable por todo, no había dejado de mirar la cadena con su inicial en ningún momento. Cerro los ojos suspirando con cansancio y dolor para luego subir a la habitación, al entrar el inconfundible aroma de la chica inundo sus fosas nasales provocando-le aun más dolor, de ninguna manera podía estar ahí sabiendo que ella jamás volvería a estar con él, habían estado separados antes pero no esta forma y era doloroso, demasiado. Se sentó en la cama tomando su cabeza con ambas manos, quería ir a buscarla pero sabía que si iba lo más probable era que sus padres no le dejaran verla, sin más abrió el cajón de su buro y guardo la cadena ahí, antes de cerrarlo vio la carta que la castaña le había dado el día de su aniversario, suspiro antes de tomarla y dudo mucho si leerla o no. No quería que su dolor aumentara pero sintió que era momento de leerla, así que sin más rasgo el sobre y saco dos hojas dobladas en tres, las desdoblo y empezó a leer.

"Mi amado Damian...

No sé realmente por donde empezar... Quizás... escribirte lo que siento sea un buen comienzo... Te amo... Aveces olvido decírtelo frente a frente porque me pierdo en tu mirada, me distraigo en tus labios  y me envuelvo en tu sonrisa. Y entonces se me olvida decírtelo...

Quiero decírtelo porque debes saberlo. Debes saber que soy tan feliz contigo porque me haces reír, porque me haces temblar, porque me haces soñar. Soy tan feliz contigo porque cada día noto tu respeto, tu aceptación de mis manías y de mis pasiones y porque no intentas cambiarme.