Aveces quisiera cerrar mis ojos eternamente y sentir como el frío se apodera de mi, dejar de sentir el tacto de la más mínima tela o del golpe más doloroso; desearía buscar tranquilidad y que mis lágrimas dejasen de salir, que lo último que pueda sea oír, y después de unas horas descansar por fin.
Volar muy lejos, sin que nadie pueda hacerme daño, que mi corazón sea un órgano más que esté pudriéndose bajo tierra, no quiero sentir, después de estar tan rota lo único que quiero es cerrar mis ojos y volar, ir a el infinito y nunca regresar, porque pensar en volver es pensar en aquel que me ha roto en mil pedazos.
Aveces mi mejor deseo es sentir el verdadero frío que será eterno.
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Cartas Para Las Estrellas.
PoesíaEn las noches podemos pensar que estamos solos pero además de eso tenemos la compañia de las pequeñas luces que adornan la oscuridad, Las Estrellas.