Capitulo 13

30 3 1
                                    


─ ¿Vas al gimnasio?

─ Sí, ando muy animado últimamente así que quiero aprovechar. Es una buena manera de desahogarme también.. si algún día quieres venir ya sabes que puedes hacerlo. Podría instruirte y todo si quieres y sólo porque eres tú hasta te lo haría gratis ─pude oír a través de los auriculares el cómo se movía de un lado al otro.

─ ¿Grátis? ¿Seguro? Sigue siendo parte de tu trabajo.

─ Bueno, si insistes creo que podría cobrarte con especias ─bromeó en tono coqueto y sonreí.

─ ¿Ah, sí? ¿Cuando empiezo entonces?

─ Buenos días.

La chica se adentró en la habitación con el pelo enmarañado y la expresión aún adormilada. Ante la distracción, ignoré por completo lo que el hombre masculló al otro lado del teléfono.

─ Buenos días, damisela.. ─no respondió, abrió la heladera y sacó la leche, rebuscando en la alacena. Sonreí divertido ante la clásica cara larga de Marita por las mañanas.

─ ¿Se despertó alguien?

─ Sí, disculpa ─me refirigí al teléfono─ ¿Que te decía?

─ ¿Estás en llamada con alguien? ─suspiré.

─ Aguantame un poquito Gabriel.

─ Gabriel, ¿Gabriel? –cuestionó la chica, arqueando las cejas.

─ ¿Puedes meterte en tus asuntos?

─ ¿Ese Gabriel? ─

─ No sabía que era el ese de tus amigos.. ─rió el mencionado. Inmediatamente me avergoncé ligeramente.

─ ¿Puedes callarte? ─murmuré apartando el micrófono de los auriculares─ Al menos disimula, idiota.

─ ¿Disimular? ─el tono juguetón en su voz no delató nada bueno─ Que disimular ni qué disimular. Gabriel, ¡hola! ¡Gaby!─exclamó fuertemente en tono burlón.

─ ¿Es una de tus amigas?

─ Es Marisol.. ¡¿Me puedes hacer el favor de moverte?! ─me vi obligado a ponerme de pie cuando su cuerpo se abalanzó por completo sobre mí. Alto alcé el teléfono, pensando en lo infantiles que debíamos oírnos.

─ Déjame hablar con él, no seas cagón... ─rogó─ Vamos, ¡Chris!

─ ¿Y si mejor te vas un poquito a la mierda? Digo, NO SÉ.

─ Vaya, ¿Con esa boquita besas a tu abuela? –Gabriel.

─ Perdón ─rió ante mi disculpa.

─ Anda, déjala. Yo tambien quiero saludarla.

Resoplé, miré con el ceño fruncido a la chica y desenchufé los auriculares sin ganas, susurrándole un "si te pasas te mato" antes de pasarle el celular.

─ Sí, tendré cuidado. Hola ¿Gabriel, no? ─sonrió con el teléfono sobre su oreja─ Sí, sí, soy yo ─me senté nuevamente─ ¿En serio eres tú? Sí, sí... Dios, eres un genio. Estaba en toda la razón al decirte eso sí ─rió totalmente concentrada en la conversación y bufé, tirando la cabeza hacia atrás─. No, sí, de nada, de nada. Siempre supe que este inútil era gay sí, la verdad te agradezco por haberlo revelado. Debes estar buenísimo para que Chris de fijé en ti.

─ ¡Marita! ─regañé en un murmullo que ella ignoró de manera exitosa.

─ Sí, si ─volvió a carcajearse─ No le diré no, tranquilo ─arquee la ceja─. Bien, está bien, te dejo sí. Pero sé amable con él, ¿bien? De seguro tiene la cola sensible así que trata de-

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 25, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Lunas ZafiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora