En Llamas - Narrado por Peeta

Capítulo 25

Finnick acepto dormir después de que Beetee se lo ofreciera por quinta vez. Ahora el vigila conmigo, no es que sea exactamente bueno, pero podría servir para ayudarme a despertar a los demás en cualquier caso.

-Sabes, he estado pensando un plan para deshacernos de los profesionales -dice Beetee irrumpiendo el silencio.

-¿Enserio? -pregunto no tanto porque me interese lo que ha dicho, sino más bien lo veo como una forma más rápida de pasar el tiempo.

-Sí, no es muy complicado. Sólo necesitaríamos organización. Estoy pensando en los detalles finales. Se los explicare más tarde.

-Esta bien -respondo y ahora sí que estoy intrigado por el supuesto plan.

Amanece antes de lo que yo esperaba, Johanna es la primera en levantarse y sólo lo hace porque tiene sed y necesita pedirme la espita ya que nos quedamos sin reservas de agua.

Finnick despierta unos minutos después, se queda tumbado en la arena un rato sin hacer nada. Aunque todos queremos nadie se anima a soltar el tema de Annie.

Un paracaídas aparece justo cuando Katniss despierta, Johanna lo abre dejando ver otro lote de pan, igual al que recibimos la noche pasada. Esta vez nadie comenta nada, y sólo tomamos cinco cada uno y dejamos los restantes.

Trato de concentrarme en la comida, pero hasta cierto punto, no se que pasará si el plan que Beetee tiene funciona y tuviéramos que enfrentarnos entre nosotros. No podría matar a alguno de nuestros aliados a sangre fría, pero también tengo presente que Katniss tiene que salir de la arena.

-Venga, te enseñaré a nadar. -Me dice Katniss sacándome de mis pensamientos mientras tira de mi hacia el agua.

Me enseña lo que ella dice que es la brazada básica, en la que a mi parecer sólo haces que tus brazos vayan en círculos mientras tu cuerpo se acomoda de forma horizontal en el agua. Me manda a dar un par de vueltas aunque no veo un gran avance, no veo el punto en esto.

-¡Peeta! -me llama Katniss unos cuantos metros más lejos así que voy con ella y me muestra como las costras se empiezan a caer con el agua.

-Mira, ya sólo quedamos ocho. Creo que es el momento de irse -me dice mientras sigue restregandose, pero es cuando me doy cuenta de que el decírmelo era su objetivo desde el principio. No el enseñarme a nadar.

No me gustaría alejarme de nuestros aliados, hay una gran posibilidad de que nos topemos con los tributos del Distrito 2, y no podríamos enfrentarlos. Katniss es buena con el arco, pero yo no poseo alguna habilidad especial más que la lucha, y estoy seguro que ellos pueden luchar mejor que yo.

-Haremos una cosa -respondo-. Nos quedaremos hasta que Brutus y Enobaria estén muertos. Creo que Beetee intenta montar una especie de trampa para ellos. Te prometo que nos iremos después.

Se lo piensa unos segundos antes de responder.

-De acuerdo. Nos quedaremos hasta que los profesionales estén muertos, pero eso es todo. -Se vuelve hacia Finnick-. ¡Eh, Finnick, ven aquí! ¡Ya sabemos cómo ponerte guapo otra vez!

Nos restregamos quitándonos todo rastro de las costras y luego nos untamos más pomada ya que la piel aún luce demasiado delicada para el sol.

Beetee nos llama para explicarnos el brillante plan que tiene. Parece emocionado, como cuando a un niño le dan un nuevo juguete y no puede esperar para estrenarlo.

-Creo que todos estaremos de acuerdo en que nuestra siguiente misión debe ser matar a Brutus y Enobaria -explica-. Dudo que nos ataquen de nuevo en campo abierto, ya que los superamos en número. Supongo que podríamos buscarlos, aunque sería difícil y peligroso.