「❝Cortos Arg/Chi ❞」》Countryhumans Fandom《

Manzanas

Dio un leve suspiro de satisfacción para luego volver a abrir sus ojos y observar el silencioso paisaje que tenía frente a él.

El que ninguno de sus hermanos esté fuera en esos momentos le parecía más que maravilloso. Y no, no es que sus hermanos fueran unos malditos insoportables, ya que eran todo lo contrario, era solo porque, de vez en cuando, él necesitaba estar en una completa soledad aunque sea unos minutos, para luego volver a tener que "cuidar" de sus hermanos.

Suspiró cansado.

Ser un virreinato no era fácil.

Ser el virreinato del Río de la Plata no era fácil.

Se acomodó un poco mejor en el árbol para volver su vista hacia lo que llamaba hogar, aunque de hogareño no tuviera nada, y mirar luego hacia el pastizal que se movía levemente debido al viento.

Sonrió.

Todo era tan perfecto.

Pero entonces, sintió un pequeño murmullo un tanto más brusco de las hojas que estaban arriba suyo para que luego unas cuantas hojas empezaran a caer arriba de él o a su alrededor.

Frunció un poco el ceño debido a esto y dirigió su vista hacia arriba para ver qué era lo que sucedía recibiendo un golpe en su cara como única respuesta.

Cerró sus ojos por lo repentino del golpe y bajó su cabeza para, instintivamente, dirigir sus manos a la zona de la nariz para comenzar a sobárselo por el dolor.

-Maldita sea. -gruñó molesto.

Luego de que ya no le doliera tanto el golpe volvió a abrir sus ojos encontrándose con una manzana frente a él.

Parpadeó sorprendido.

¿Una manzana?

Ladeó un poco la cabeza mientras arqueaba una ceja por este pequeño hallazgo. Que él recordara padre nunca les había dicho que el árbol diera manzanas. Lentamente se estiró hasta poder tomarla para, así, inspeccionarla...

Aunque ahora que lo recordara eso solo era una mazana, nada fuera de lo normal y mucho menos algo que nunca antes hubiera visto.

Lo único que hizo fue dar un leve bufido por eso y ya comenzar a ver con desinterés la fruta.

En el momento en que iba a morderla el murmullo de las hojas volvió a sonar alarmándolo y haciendo que rápidamente se pare y corriera fuera de la zona de impacto donde antes había caído la primera manzana al pensar que caería otra más.

Y estaba en lo correcto.

Cuando miró donde anteriormente estaba se encontró con ahora dos manzanas para que luego de unos segundos una tercera cayera.

Eso ya le pareció raro, que él recordara las manzanas no caen así.

Comenzó a acercarse a estas para luego dirigir su vista desde donde habían caído. Estaba a punto de preguntar si había alguien ahí cuando logró divisar una pequeña cola amarillenta pasar por entre unas ramas.

Eso le provocó una leve sonrisa divertida.

-¿Qué estáis haciendo pequeña lagartija?
-preguntó divertido-. No estaréis robando ¿verdad?

Luego de hacer esas simples preguntas el pequeño movimiento de las hojas se detuvo por unos segundos para que luego volviera a producirse y, esta vez, apareciera un pequeño country con su cabeza y medio cuerpo colgando sin tocar el suelo sujetándose solo con su característica cola (que había adquirido meses antes) mirando a quien tenía en frente con el ceño fruncido.