"Frágil"

Brote

"Llévate todos los recuerdos que dejaste dentro de mi porque rara vez puedo soñar con otra cosa que no seas tú y esa retorcida manera que tenias de amarme, misma que extraño tanto desde que me dejaste atrás".

Finalizaba la reunión con sus compañeros de trabajo, el joven locutor de castaña cabellera estaba tan desubicado. Ver a Hitch era algo que no esperaba, menos verla tan fresca y con esa sonrisa declarada al coquetear con los demás.

Los recuerdos de su pasado junto a esa mujer le amargaban la vida, sintiendo ese sabor desagradable Eren camino y sin saberlo llegó hasta la entrada de la cafetería donde trabajaba.

-¿Eren? ¿Qué haces aquí?-Levi estaba cerrando el local pero no esperaba que uno de sus empleados estuviera afuera y menos con el clima que se avecinaba al estar el cielo tan nublado.

-No lo sé, mis piernas empezaron a caminar y cuando menos lo esperaba...llegue hasta ti-Eren se notaba demasiado ebrio, el olor a alcohol en su ropa lo delataba.

-Dejarte aquí es mala idea-Inclinándose, Levi ayudo a Eren a ponerse de pie pues el joven estaba de cuclillas-No tengo idea de dónde vivas pero no puedo dejarte aquí, mi conciencia no me lo permite.

Llevándolo al interior del local, subiendo las escaleras aunque le costaba trabajo llevar un peso extra pues Eren sin duda era pesado pese a no ser una persona obesa ni nada de eso.

-Pesas bastante-Entrando en su hogar, dejando a aquel joven sobre un sillón.

Levi movía sus hombros hacia atrás, había sido un día pesado porque estaba solo debido a que su hijo se hallaba en casa de unos compañeros preparando un y trabajo para exponer.

Esos días agradecía tener mas personal pero la falta de Bertholdt por una enfermedad lo dejaba solo con Marco y él como dueño debía hacerla no solo de chef sino de mesero y cajero en un día donde las damitas estaban dispuestas a sacarle canas verdes por sus constantes preguntas.

-Lamento causarte molestias, pero...-Eren estaba con la cabeza gacha, sus cabellos cubrían su frente y no permitían ver sus lindos ojos en los que el recuerdo amargo de su ayer estaba presente.

-No deberías beber como si no existiera un mañana. Es malo para tu salud descuidarte así-Levi camino hasta la cocina, ese chico necesitaba un buen café cargado.

La especialidad de su cafetería fue preparada y Eren de un momento a otro ya estaba detrás de Levi, olisqueando el cuello de este mientras Levi se quedaba quieto.

-Hasta este momento me doy cuenta de que tu olor es muy rico-Deslizando sus manos por la cintra de Levi, sintiendo la delgadez de aquel cuerpo-Tienes una piel muy blanca ¿Todo en ti es así?

-No molestes, estas ebrio y no sabes lo que dices-Le humedad repentina en su cuello, Levi giro rápido pero la mirada de Eren era la de un cazador.

-Estas en celo, tu aroma es delicioso y me está pidiendo a gritos que te haga mío-El calendario estaba no muy lejos, Levi lo miro y comprendido que su ciclo de celo no debía iniciar aun, pero...

-Aléjate de mí, soy un omega casado y tu eres...mngh-Un beso acallo los labios de aquel omega.

Uno en el que Eren metía su lengua húmeda para recorrer toda la cavidad bucal de Levi, colocando una de sus piernas en medio de las ajenas y deslizando sus manos debajo de la playera que usaba Levi.

Se separaron por la falta de aire. pero las pupilas de Levi estaban tan dilatadas y empezaba a sentirse mareado, su cuerpo lo traicionaba.

Deslizándose sin poder sostenerse, Eren se acomodó en medio de las piernas ajenas bajando los pantalones junto con la ropa interior mientras lo que quedaba de la cordada de Levi trataba por todos los medios de impedir que aquel alfa siguiera con sus avances.