Con el anhelo satisfecho, tan solo reposando uno al lado del otro, aun con secuelas en sus cuerpos -pues no estaban del todo recuperados luego de aquello- permanecieron en armonía unos minutos, Narancia todavía asimilando lo que acaba de ocurrir mientras que Risotto solo se encontraba descansando.
El aroma posterior al sexo aún los invadía, cuando desde la cartera que Narancia dejó tirada por algún lado de la habitación comenzó a escucharse un estruendoso sonido.
El chico lo omitió por completo, teniendo el cuerpo adolorido no pensaba levantarse a buscar su móvil.
Pero este lejos de acallarse parecía sonar aún más fuerte.
—Alcánzamelo, por favor— pidió con pereza.
Al instante Risotto se levantó y comenzó a buscar entre la ropa esparcida por el suelo, sin tardar demasiado en encontrar la cartera, el móvil sobresalía unos centímetros, por lo que fue imposible ignorar que en la pantalla iluminada el remitente de aquella llamada era alguien agendado con un emoji de corazón.
—¿Quieres que atienda? — preguntó dudoso.
—No— solo respondió estirando su mano hacia él, haciendo el mínimo esfuerzo.
Al recibirlo y ver de quien se trataba su expresión cambió por completo, pasando por la sorpresa y en parte confusión, terminando en una especie de melancolía. El ser tan transparente a veces puede jugarte en contra. Sin dudarlo solo corto la llamada, apago el teléfono e ignoró por completo el asunto, como si no hubiese ocurrido.
—¿Puedo preguntar? — dijo Risotto intrigado.
—Ya lo estás haciendo— respondió con simpleza —¿Tanto se nota? —Preguntó con una sonrisa triste.
—Era tu pareja— afirmó, aunque en realidad quería preguntarlo.
—No, no lo es, estoy soltero, pero es algo complicado de explicar— declaró vagamente.
—Puedes contarme si es que quieres— manifestó tomando una manta y tapando al chico, para luego recostarse tal y como estaba antes.
—Creo que sería extraño hablarte de él, cuando aún estoy desnudo sobre tu cama.
—Como quieras, puedes conversar conmigo cuando desees— respondió sin presiones abriendo una caja de cigarrillos que había en su mesa de luz, ofreció fumar y acepto, aunque este fuese de mariguana.
—Gracias— respondió algo más relajado luego de la primera pitada, aunque de igual manera se encontraba algo apenado.
—Es por su culpa que me quiero quedar un tiempo más aquí— confeso de repente Narancia, luego de un rato en silencio, quizás expresarse le haría bien aun en la situación en la que se encuentra ahora.
—Estás huyendo de alguien— afirmó el líder.
—No de la manera en la que piensas, pero si— aclaro.
—Asuntos sentimentales entonces— dedujo expulsando el humo.
—Exacto— respondió al instante —Llevaba tiempo enamorado de él y en cuanto pude se lo confesé, se sintió horrible la manera en la que me rechazo, pero al final quedamos en buenos términos, volviendo a ser amigos o algo así.
—Luego de situaciones como esas no se puede volver a ser amigos como si nada hubiese ocurrido— murmuró más para sí mismo que para ser escuchado.
—Parece que si me entiendes...
—Lamentablemente si— solo respondió algo incómodo desviando la mirada —¿Si quedaron en buenos términos porque estás huyendo de él? — preguntó evitando su tema.
—Hace un tiempo comencé a vestirme en público de esta forma, ahí fue cuando el cambio, me llegó a confesar que no sabía que es lo que le pasaba, que estaba realmente confundido, pero que no quería ilusionarme, aunque en realidad hacía todo lo contrario.
—¿Por eso huyes de él? Por qué no quieres ilusionarte— pregunto algo escéptico.
—No, es porque él no sabe lo que quiere y estoy harto de ser solo yo el que intenta avanzar, quiero que él se interese en mí sin limitarse a como este vestido.
—¿Cómo estés vestido? — pregunto confundido.
—Olvide decirte que solo tiene acercamientos hacia mí cuando uso prendas de vestir femeninas.
—¿Dice ser heterosexual? — indagó.
—Exacto, llegó a decirme que solo sale con mujeres y que le daría asco salir con un hombre, algo por demás extraño teniendo compañeros en el grupo que son abiertamente gay y él jamás demostró el ser homofóbico.
—Es de tu mismo grupo entonces, ¿Cómo se llama el idiota?
—Pannacotta Fugo se llama el estúpido— contestó —¿Lo conoces?
—En realidad no, no sé quién es— mintió —Pero creo que solo hay dos opciones, que tu nueva imagen lo esté ayudando a realmente acercarse a ti o que solo se esté engañando a sí mismo fingiendo que eres una mujer, ¿Hablaste esto con él?
—Si, y esquiva por completo el tema, por eso antes de venir aquí peleamos, le dije que si no tiene una respuesta para cuando vuelva se olvide de mí.
—Y entonces por eso no quieres volver, tienes miedo a que te rechace de nuevo— dedujo.
—En parte sí, pero también quiero darle algo de tiempo para reflexionar por su propia cuenta.
—Eso me parece bien, en todo caso yo estaría muy a gusto de que te quedes un tiempo más aquí— dijo guiñando un ojo.
—Eres un desvergonzado— contestó sonriendo mientras empujaba su hombro de manera juguetona.
—Tú también estarías muy a gusto aquí, así como ahora— volvió a bromear sonriendo de lado, haciendo que Narancia ría de forma que ni él esperaba, terminando por blandir el ambiente lúgubre antes formado —¿Acaso miento?
—Sabes que no, no mientes y te estás aprovechando de eso— confesó.
—¿Y entonces? — Sostuvo expectante.
—Entonces segundo round— afirmó tirando el ya consumido cigarro a quien sabe dónde.
La noche para este par recién comenzaba y aprovecharían al máximo cada momento que puedan disfrutar uno al lado del otro.
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Dude... dude looks like a lady (FugoNara)
FanfictionNarancia tenía un secreto, nunca había salido del "closet" y a su vez su closet tenía otro secreto. Fugo pensaba que era heterosexual, hasta que un cambio en su amigo hizo que su vida de un giro inesperado. -Advertencia: los protagonistas van a desa...