Eran aproximadamente las 9:00 de la mañana cuando Liz abrió los ojos después de dormir, se quedo mirando el techo preguntándose a si misma si era real todo aquello que había pasado la noche anterior ¿De verdad Willyrex había coqueteado con ella?
De repente se percató de que tenía el celular en la mano, tal vez callo dormida luego de hablar con Ale por la noche, vio la pantalla y se dio cuenta de que tenía un mensaje
-madre mía, a que willy me a deseado buenos días
Pero no, era su amigo Chris que también tenía una beca para la academia, le decía que había encontrado un departamento que tal vez sería del agrado de ella y Alejandra
-¿cuánto cobran?
-70 dólares al mes
Seguro le alcanzaba! Los padres de Liz le mandarían 580 dólares al mes, además tendría el apollo de su tía quien le daría 300 al mes. Además de la situación económica en la que Ale estaba, debía poner su granito de arena en la renta del departamento ¿no? La cuestión era que el precio era perfecto
-bien, cuando podría ir a verlo Christian, me has salvado la vida tío
-hoy mismo, a las 7 de la noche ¿quieres que te acompañe?
-sí por favor
-paso a la casa de tu tía a las 6:30 ¿esta bien?
-perfecto
Pensó en llamar a Alejandra pero primero debería asegurar el departamento.
Por otro lado, Guillermo despertó temprano ese día por que seguramente Samuel estaría dormido aun.
Bajo de la cama y se asomo al cuarto de su amigo, así era, estaba dormido.
Cerro la puerta lentamente y fue hacia la cocina, preparo 2 cafés americanos como los de ayer...
Guillermo recordó todo lo que había pasado ayer en el café, pensó el segundo exacto cuando Liz entro con un nintendo 3ds en la mano, con su cabello despeinado y recogido en una coleta, un mar de emociones lo invadieron en aquel momento y la llamo, casi por inercia y sin pensarlo, necesitaba hablar con ella.
Liz estaba desayunando con su tía cuando recibió la llamada de Guillermo.
-hola?
-emmmm, h-hola
Liz estaba a punto de echar el grito de fangirl que muchas echarían cuando Willyrex te llama por teléfono, pero esta vez era Guillermo Díaz, el tipo que le invito un vino, no Willy, el socorrista, rio un poco de sus propios pensamientos para luego contestarle
-buenos días
Esa frase mato a Guillermo, literalmente
-emmm, bueno quería hablar contigo y preguntarte si estas disponible para hoy, quiero reafirmar unas cosas que he estado pensando toda la noche
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Dos amigas, un destino
RomanceEsta historia está basada en hechos algunos ficticios y otros reales, trata sobre 2 amigas que comparten un mismo gusto, cuyo gusto es un algo complicado de encontrar, a pesar de haber llegado a ser tan fácil llegar a cumplir ese gusto, pasaron algu...