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Mattia POV'S
Llama por última vez a Adriana.
–¿Hola?.– Atendió el teléfono, por dentro salte de emoción.– ¿Quién habla?.– Pregunto.–
–Soy yo, Mattia, de la escuela.– Dije rápido.–
–Ahh, ¿Que hace el fuckboy de la escuela llamándome a mitad de la noche?.– Pregunto con un tono sexy, yo hice una mueca aunque ella no la viera.–
–Necesito saber en donde trabaja Madison.– Dije apurado, ella se quedó en silencio.– Por favor Adriana, es urgente.– Suplique, ella suspiro.–
–Me matará si se entera de que te lo dije Mattia, no puedo hacerlo.– Dijo decepcionada.–
–Mira Adriana, si me dices esto.– Pensé una buena excusa.– ¡Te conseguiré una cita con Kairi.– Grité, sabía que a ella le gustaba, se notaba cada vez que ella pasaba por al lado nuestro o más bien de Kairi.–
No se escuchaba nada, solo silencio.
–Esta bien, pero no vino de mi.– Dijo con tono amenazador.– Ve al club que está aquí cerca, la encontraras allí.– Dijo.–
–¿El club?, ¿El de las strippers?.– Pregunte confundido.–
–¡Si Mattia, el de las strippers, ya déjame en paz!.– Grito y cortó.–
Me puse mis tennis y salí de mi edificio.
Hacia frío y yo no sé qué podría estar haciendo Madison en ese lugar.
Llegué al club y suspire.
Entre y una multitud de gente estaba gritando mirando a una chica bailar en el caño.
Esa chica.
Mi chica.
Sin embargo me quedé viéndola, damn girl, si que se sabía mover.
Pero todos esos pensamientos cambiaron cuando me di cuenta de que todos los viejos la querían tocar y les tiraban dinero el cual ella agarraba.
Entre todos, yo era el que más resaltaba, todos vestían colores oscuros, yo tenía un camperon blanco con rayas reflectivas, ¿Que más llamativo que esto?.
Ella paso la mirada sin expresión por todas las personas hasta que se encontró con la mia.
Madison POV'S
Recorrí mi mirada cansada por todo el público.
Alguien llamo mi atención, una persona que tenía un buzo demasiado llamativo, no se le veía la cara, hasta que una de las luces lo iluminaron.
Era Mattia.
Me puse nerviosa, no quería que me viera así, así que decidí correr de aquel escenario.
–¡Oye!, ¡Byers!, ¡Vuelve aqui!.– Grito mi jefe.–
Agarre mi ropa y salí lo más rápido de aquel lugar.
Mattia llegó rápido hacia mí y me confronto.
–¡¿Que mierda Madison?!, ¡¿A esto te dedicas eh?!.– Grito desesperado.–
–¡¿Porque te importa Polibio eh?!.– Grite enojada.–
–¡No me importa!.– Dijo mientras se agarraba del cabello.–
–¿Entonces porque haces este drama?.– Pregunte confundida.–
–A nadie le gustaría que su amiga este metida en esto.– Dijo.–
–El problema aquí es que no somos amigos Mattia, solo quieras acostarte conmigo, ¿Crees que soy ingenua?, Conozco cada uno de tus pasos para cogerte a una chica.– Exclamé, el apretó los labios.– Eres un fuckboy, ¿Como esperas que sea tu amiga?.– Pregunte.–
–Confia en mi.– Dijo en forma de súplica.–
Sonreí arrogante.
–Te cojes a quien quieras, como quieras y cuando quieras, ¿Como esperas que confíe en ti Polibio?.– Hablé para luego irme de ese estacionamiento.–
