Todos somos inestables en algún momento. Necesitamos un café para lidiar con las trasnochadas o el cansado trabajo, un agua con hielos para los días de aire caliente y bronceados, un jugo natural verde cuando queremos imitar por tres días a la chica...
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Quede totalmente perpleja, en estos momentos estoy segura que podría asimilar la gente que soy una estatua o parte de la decoración. No logré respirar hasta que la vi desaparecer entre la cantidad de gente.
Eso quería, mi reacción. No soy lo bastante ingenua como para no llegar a notarlo.
De fondo escucho que Vicente comienza a hablar con unas personas, pero no podía darles mi atención. Era imposible. Simplemente no me importaba.
Imposible... Hasta que tocaron mi cintura y me atrajeron hacia el grupo. Fue en el momento que me tuve que obligar a socializar, mostrar mi mejor sonrisa y evitar distraerme.
Ya comenzamos con las falsedades. Ya nos habíamos tardado. Hay que comprender que en esta clase de mundos, nadie se quiere en verdad. Todos están por sus propias ambiciones, por lo que actuar es tu mejor aliado.
Cuando mi mente regreso a la actualidad, en verdad, lo que menos entendía era de lo que decían. Yo solo pensaba en ella. Solo asiento a la mierda que estuvieran diciendo.
El miedo comenzó a disiparse de a poco, mi cuerpo comienza a dejar de sentirse tan frenético y por lo menos, comencé a relajarme y entender.
No puedo jugar a este juego, porque la única perjudicada seré yo. Ademas, no soy buena con las mentiras, tuve un colapso en el momento que me metí a duchar con Vicente en mi departamento. No quiero vivir así por un periodo largo de tiempo.
Necesitaba alejar a Vicente de mi vida.
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Estaba charlando con un productor musical, sabía quién era, se el tipo de trabajo que implementa y claro, conozco a sus clientes. El es perfecto para la oportunidad que necesito.
Me dedique a revisar la lista de invitados que me dio Abby, para buscar cada uno de ellos y ver como lucían y a que se dedicaban. Sabia que eso era tener la mejor carta bajo la manga.
- Te vi. Vi tu presentación en ese lugar, cerca de la playa. Suelo ir cuando quiero encontrar buenos talentos. Tu eres uno. - Su sonrisa es deslumbrante y yo no puedo creer lo que acaba de decir. Pensé que tendría que decir toda mi trayectoria como mínimo. Usualmente alguien de ese calibre es un sueño que te conozca.
