capitulo 1

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- ¡Llegarás tarde!, despierta.
Así es mi vida... Siempre apresurada.

Hace unos días volvió empezar las clases, soy muy simple, no me emociono mucho, es un poco molesto... Y por lo visto hoy llego tarde.

- ¿Lista?

- Sí. Veo injusto que solo yo vaya hoy... - Haciendo puchero -

- ¿Enserio, injusto? Lo dice alguien que no a ido ninguno de los días anteriores.

- ¡Pero mamá!

- Nada, hoy te toca.

Sin decir más, me subí al auto, al parecer tenemos vecinos nuevos...

  *** En el instituto***

Nada nuevo, las mismas caras, otro año sin nada interesante...
Mi madre me dejo en una parada cerca de donde estudio, por algún tipo de emergencia, supongo, tampoco pregunte.
- ¡Yuls!
Escuche que alguien gritó.
- ¡Hey! Espérame. Pensé que este año no vendrías.

- No exageres -sonreí-

- Como tu amiga, me siento feliz de verte.

Ella es Mels, siempre hemos estado juntas, desde muy niñas. Nuestros nombres son un poco similares, oh eso pensamos.

- Dime, ¿Quedamos juntas? - Pregunté-

- No... Me dijeron que un tonto se me adelanto.

- Quieres decir qué. ¿hay alguien nuevo?

- Eso... oh alguien se paso. - dijo Mels-

- Resulta ser lo mismo ¿no crees? - Mels no es muy lista a veces...-

Bueno... como lo imaginé, hoy fue aburrido, y aparte mis hermanos no vinieron conmigo y ahora me toca irme sola a casa...
Mientras voy jugando con una piedra cerca de mi casa, veo de lejos a mi madre hablando con la nueva vecina. Al parecer se atrasaron con la mudanza.
No soy muy sociable, pero al menos sonreí. Algo es algo.
Vi a mi hermana en el sofá, esta un poco enferma y a lo que tengo entendido, mi hermano igual y por eso vine sola hoy y a como veo mañana me iré sola también, dejé de mirarla y me dirigí hacia mi habitación, esa cálida y oscura habitación que tanto amo. Si por mi fuera, no saldría en todo el día de ahí... bueno excepto cuando tengo hambre, suelo comer bastante, jaja quien lo diría y con este cuerpo. Pero hoy no cenaré y sólo dormiré.

*** Día siguiente***

Dormí como un bebé, algo me dice que será un buen día.
Mientras me alistó me doy cuenta que todo esta muy tranquilo, bajo hacía la cocina y veo el desayuno y a la par una nota que decía
"Esta recién echo, disfrútalo mientras esté caliente"
¡Lo toqué y no, no estaba caliente, para mi opinión está muy frío... oh!  espera. ¡No, no, no!
mire el reloj y eran las 8:30 am!! Lo cual yo entro a las 7.
Salí lo más rápido que pude, sin desayunar sin peinarme y sin muchas cosas más. ¡Tardé!  llegar tardé! es lo único que me sale bien. Empecé a correr y por accidente pegué mi hombro con otra persona. La culpa fue mía, lo sé, pero solo gruñí al respecto y seguí corriendo.

Trate de entrar a la clase lo más silenciosa posible, pero fue inútil, el profesor me hizo mala cara.
- Señorita, buenas tardes ¿no saludas? - Se sentía el sarcasmo en el aire - vamos todos, saluden a la señorita presente.
- Buenas... - dije entre dientes-

- ¿Sabes a quien le gustaría que lo vayas a saludar?

No era necesario que lo dijera, sabía a lo que se refería.
Salí un poco molesta por el claro sarcasmo que suele usar el profesor, detesto eso.
Esperaba ser llamada por el director, cuando sentí como alguien paso casi llevándose mi pie, levante la mirada, y vi como alguien se sentaba al otro extremo de la banca, era de piel clara, el cabello semi largo negro con los brazos cruzados, no lo detalle mucho por que en ese instante me llamaron.
- Señorita Yuls... Dime por que no me sorprende verla aquí.
¡¿Sorprende?!  es mi primera vez en este año.

- Perdón. Pero me esta confundiendo, esta es mi primera vez.

- De este año, del anterior no, venías casi todos los días, y aun te preguntas como no aprenderme tu nom... - interrumpido-

- Disculpe... - el chico de antes entró-

- ¿Si? En que te puedo ayudar - levantándose de su asiento-

- Me dijeron que pasara...

Se notaba algo avergonzado, ya que tenía la mano en la nuca y la cabeza hacía abajo.

- Toma asiento. Bueno si los dos están aquí, significa que es por la misma razón.

- Como puede saberlo, si no me a preguntado. - dije-

- No es necesario preguntarte para saber jovencita.

Me giré y vi al chico, ¿siempre tiene la cabeza hacía abajo?

- Hey. - le hablé- ¿Por qué estás aquí? - viendo fijamente cada movimiento-

- Llegue tardé - voltio a verme-

¡Quede en shock! La cara de ese chico era casi perfecta, perfilada, y unos ojos muy profundos de color celeste y ni hablar de las pestañas. Arrugué mi cien y le pregunté.

- ¿Por qué me pateaste? – dije alzando una ceja-

- Fue un accidente - sonrió de lado-

- Sigo esperando una disculpa sabes- cruzándome de brazos-

- Yo igual - entre cerro los ojos-

- Espera, ¿qué? por estar sentada ¿acaso?

El estaba apunto de contestar cuando una voz conocida nos interrumpió.

- Basta! Los dos se van para sus casas con una advertencia.

- Es mucho, solo por llegar tarde ¿no le parece? - protesté-

- Siempre tú y tu valentía de responder- entre cruzo sus dedos con los codos en el escritorio- Los mandare para sus casas, porque de todos modos salen temprano y ya no llegan a la última, sin advertencia, gracias.

- Viste, funciono de algo- sonreí por dentro-

-Yuls! - dijo en un tono un poco alto-

- Gracias, nos iremos - dijo Ian-

Me tomó de la mano y me saco de la oficina del director, antes que yo siguiera abriendo la boca. Me quede mirando nuestro agarre y era algo irónico y a este ¿qué le pico?


*** Narra Ian***

Mis padres decidieron mudarse de casa, por motivos de trabajo, quiere decir que iniciar de cero no es una opción.
- Por que duras tanto Ian! - grito mi padre desde el auto-

- Perdón, ya estoy listo, disculpa. - abriendo la puerta del auto-

- Tú siempre - dijo mi hermano con los ojos en blancos-

- Tyler no te desquites con tu hermano - dijo mi madre-

A Tyler no le agrada mucho la idea de mudarnos, pero no queda de otra. Personalmente pienso que tal vez sea interesante... Mi madre ya se había encargado de todo, ahora lo que quedaba era recogernos a nosotros, y para mi suerte ya se habían llevado mi uniforme a la nueva casa, tengo que llegar a cambiarme y irme rápido.

- Aquí es chicos - dijo mi padre-
La casa no estaba nada mal, y el vecindario tampoco, hay una vista genial y el clima era fresco, hoy me siento bien. Suelo estar de mal humor todo el tiempo y no presto mucha atención a los demás o a las cosas que me rodean. Es más, detalle mucho este lugar.
¡Ya me dirigía hacía el instituto con mis audífonos puestos, cuando de pronto siento que pegan con mi hombro, era una chica... me quité los audífonos molesto y la chica ni se molestó en voltear a ver y gruño!  gruño! ¡como si yo tuviera la culpa!
esa chica de contextura delgada y de cabello largo lacio, tenía el mismo uniforme que yo, supongo que también va tardé. ¡Me alegro!  por descortés!

Iba viendo mi horario y al parecer ya me había saltado las primeras dos lecciones, vi a una señora con unos papeles en uno de los pasillos, le pedí que me orientará y me señalo el aula correspondiente.
Entré y todos voltearon a verme... wow nunca había tenido tanta atención. Aún que lo admito, soy genial.

- Debes de ser él nuevo - dijo el profesor dirigiendo su mirada hacía mi-

- Soy Ian y es un...

- Te presentas luego, tendrás que ir a la oficina del director - cruzando los brazos-

- Ah?

- Sí. llegas tarde y tenemos normas muy estrictas en esta institución.

- Entiendo... - me voltee-

Por un momento pensé en irme, pero mientras caminaba de nuevo por los pasillos, pude ver de largo a la chica descortés. Y pensándolo bien, supongo que esa es la dirección. Me dirigí hacia donde ella ya que sé que llego tarde, y por "error" pateé un poco su pequeño pie y me senté, pero no tan cerca y no la vi a la cara, al contrario, fui yo quien se puso el cabello en el rostro. Sentí cuando ella se puso de pie y paso al frente mío, ingresando a la oficina.
¡Genial!  me vengue, ahora me iré ...

-Joven... - escuché decir-
Volví y una señora me indico que entrará. ¿Y ahora que haré? después de patearla, ahora me tocara sentarme junto a ella... lo pensé dos veces antes de ingresar, pero la señora me abrió la puerta y solo yo me lograba ver, así que decidí hablar...

- Disculpe... - entre sin mirar a nadie -

- ¿Si? En que te puedo ayudar - dijo el director-

- Me dijeron que pasara... - puse mi mano en mi nuca y aun sin levantar la mirada-

- Toma asiento. Bueno si los dos están aquí, significa que es por la misma razón.

- Como puede saberlo, si no me a preguntado. - dijo la descortés-

- No es necesario preguntarte para saber jovencita.

Ella intimida un poco... pensándolo bien.

- Hey. - me habló- ¿Por qué estás aquí?

- Llegue tardé - dije levantando la mirada hacia ella-

Hizo una pausa y de pronto arrugo la cien y me preguntó.

-¿Por qué me pateaste? - dijo alzando una ceja-
Ja! acaso no recuerda que ella hizo algo primero.

- Fue un accidente - dije sonriendo-

- Sigo esperando una disculpa sabes- cruzo sus brazos-

- Yo igual -dije con una mirada desafiante-

- Espera, ¿qué? por estar sentada ¿acaso?

Estuve apunto de contestar cuando la voz del tipo que estaba al frente habló.

- Basta! Los dos se van para sus casas con una advertencia.

- Es mucho, solo por llegar tarde ¿no le parece? - dijo ella-
¡Estará loca!  como se le puede ocurrir contestar así! lo empeorará.

- Siempre tú y tu valentía de responder- entre cruzo sus dedos con los codos en el escritorio- Los mandaré para sus casas, porque de todos modos salen temprano y ya no llegan a la última, sin advertencia, gracias.

- Viste, funciono de algo- dijo-

-Yuls! - dijo en un tono un poco alto-

- Gracias, nos iremos - dije-

La tomé de la mano antes que nos metiera en más líos y me dirigí hacía el pasillo.
Seguí caminando y aun llevaba su mano sujetada, me detuve y la miré...

*** Narra Yuls***
- ¿Te entretienes? - dijo y de inmediato me solté de su agarre-

- Se puede saber... ¿por qué soy yo la que se tiene que disculpar?

- como que ¿por qué? chocaste con mi hombro!!

¿Y este que se cree?  que delicado, y por eso me tiene que patear?
estaba a punto de contestarle, pero tocaron la alarma de receso. Todos saldrían de sus aulas y si me ven con él, sabrían que hay algo raro...  tengo que actuar rápido.

- Cállate - dije con mal modo, tomando su brazo-

- Si que te entretienes, eh. - dijo con mirada picara-

Me dirigí hacía un lugar donde nadie nos viera, por la cancha era perfecto.
- ¿Por qué me trajiste aquí? - algo confundido-

- Que pasó con tu cara de galán, niño bonito.

- No me cambies de tema!

- Ay... no te alteres, delicado - incliné mi cabeza- te traje aquí por que si me ven con alguien que no sea Mels...

- ¿Quien es Mels?

- Mi mejor amiga... como te decía. Si me ven con alguien más, lo verán raro por que siempre ando sola o con ella. ¿entiendes?
Solo sonrío y me miro fijamente.

- Me tengo que ir - dijo y siguió su camino-

Claramente hoy fue un día extraño, primero amanecer sola en casa y conocer a un chico totalmente raro. Bien.. yo también me iré, de todos modos, puedo salir.
Me retracto, si hay una cara nueva...

Ambos tenemos problemas con el tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora