1
¿Has visto a alguien morir alguna vez? Yo si.
¿Has presenciado un asesinato? Yo si.¿Has disfrutado matar a alguien? Bueno...yo si.
Si estás leyendo esto significa que al fin lograron descubrir todas mis "fechorías", no puedo decir que estoy orgulloso de lo que hice, pero, fue gratificante. Sus caras llenas de miedo, impregnadas de terror, con ese olor a...sangre. Lo que busco en mis víctimas es que, con sus muertes, me hagan sentir vivo. ¿Qué estoy loco? Tal vez, no puedo juzgar a quienes no pueden comprenderlo.
Si por casualidad sigues leyendo esto, puede ser que tal vez lo comprendas o tal vez solo tienes curiosidad por lo que está por venir.
Ésta será mi firma de muerte, será mi verdugo, será la pieza faltante del rompecabezas que servirá para culparme de una vez por todas de todos los actos indescriptibles que cometí; aunque aquí si los describiré...no con mucho detalle. ¿Estás listo? Empecemos...
2
Natalie Wembley
42 años
Natalie, la mujer que impulsó mi carrera. Pensarás que soy un completo Idiota por llamarla de esa forma, pero no es en el contexto que piensas. Sabes, antes de empezar todo esto -y me refiero a los asesinatos por si no fui lo suficientemente claro- trabajaba en una empresa. El papeleo era incesante todos los días pero había algo que me motivaba a seguir acudiendo a mí trabajo; Natalie, me había enamorado de ella. Cualquiera quedaría encantado ante sus hermosos ojos cafés o ese pelo rubio que deslumbra.
Muy temprano en la mañana, yo ya me encontraba en mi puesto de trabajo cuando apareció desde el ascensor. Pasó frente a mí totalmente indiferente y pareció no importarle que estuviera allí, inclusive me atrevería a decir que ni siquiera notó mi presencia. Vaya, eso me fastidió bastante, pero lo dejé pasar.
Hasta ese momento todo iba bien, no le agradaba a la mujer que me gustaba, tenía un trabajo decente que cumplía con mis exigencias, unos buenos compañeros de trabaj...no, eso no tenía.
Me hacían sentir la burla del grupo, y eso me irritaba. Nunca pensé en asesinarlos, pero la perra de Natalie se lo merecía sin duda alguna.
En una reunión con los compañeros del trabajo, estábamos reunidos en la barra bebiendo y bebiendo. Estábamos gastando la primer quincena del año y a nadie le importaba, solo queríamos disfrutar.
El bar se fue quedando vacío, la gente se iba retirando y nosotros ya lo estábamos pensando. Yo no bebí mucho, lo normal, me encontraba perfecto. Pero Natalie se había pasado. Al momento de retirarnos del bar, todos salieron menos ella. Me quedé esperando y unos compañeros regresaron.
Me dijeron que me fuera, me empujaron contra la puerta y tomaron mi billetera. Cerraron la puerta y uno de ellos me hizo una seña para que haga silencio mientras cerraba la cortina de una de las ventanas. Tenía una idea de lo que tal vez iban a hacer, pero no quería interrumpir así que me fui.
En la mañana del miércoles, un día después de la fiesta, escuché las sirenas. Nunca se me pasó por la cabeza que harían eso. Dos policías entraron rompiendo la puerta, me tiraron al piso y me esposaron. Repitieron las mismas líneas de siempre y luego dijeron "se lo acusa de violación contra la señorita Natalie Wembley"...quedé estupefacto, no sabía que decir. En todo el camino no dije una sola palabra y mantuve mi mirada fija en la carretera, guardé ese momento en mis recuerdos y nunca lo olvidé. Los malditos hijos de...en fin, me condenaron a veinte años que tuve que soportar debido a que no tenía pruebas que me respaldaran. Todos recuerdan que salí al último, pero nadie los recuerda a ellos regresando al bar. Y sí, de forma magistral el encargado del lugar también me vio SOLO A MÍ.
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Diario de un asesino
Short StoryUn hombre es acusado injustamente de una violación y es encerrado por veinte largos años. En todo ese tiempo, un solo pensamiento se aglomeraba en su cabeza "matar a la maldita que lo había enviado a ese lugar". Cumplida su condena...bueno, creo que...