Chapter 14: Jongin
Kim Jongin no se consideraba una persona fácil de sorprender, pero sí era cierto que había cosas que le abochornaban mucho. Como cuando Chanyeol y Baekhyun se lanzaban miradas llenas de sexo, o cuando Baekhyun le limpiaba la boca a Chanyeol lamiéndole la comisura de los labios, o cuando Chanyeol le metía mano descaradamente a Baekhyun en público, o cuando… en fin, todo tenía que ver con Chanyeol y Baekhyun. Sus dos hyungs lo iban a volver loco porque él siempre había estado muy seguro de su sexualidad y desde que lo había conocido a ambos se la cuestionaba. Y más desde que había conocido a Kyungsoo. Porque al principio Do Kyungsoo era su callado compañero de cuarto, al que apenas veía a la hora de dormir y a la hora de despertarse, pero cuando se unió al pequeño grupo que Sehun, su mejor amigo, le había presentado, y lo vio ahí, sentado junto a la feliz pareja descarriada, haciendo pucheros con la boca; y esa deliciosa boca manchada del chocolate caliente que estaba bebiendo, y comenzaron a hablar, incluso se hicieron inseparables y jugaban, se peleaban, se lanzaban cojines cuando el otro no le hacía caso o se burlaba…
Y se dio cuenta de su olor… el olor de su amigo lo volvía loco y las palabras de Chanyeol se habían clavado en su mente con permanente.
E iba a reclamarle eso cuando los vio. Los dos desnudos, el menor encima del mayor besándolo con ternura y acariciándose el cuerpo, mimándose con cara de embobados.
Su estado mental explotó y calló redondo al suelo.
-¡Kai!- notaba como Baekhyun le daba pequeños golpes en las mejillas, pero su subconsciente aun lo tenía atado al mundo de los sueños.
-¡Espera!- dijo Chanyeol- Le haré el boca a boca.
“¡¿Qué?!” pensó. Abrió los ojos de golpe alcanzando a ver la cara de su amigo a pocos centímetros de la suya y su primer impulso fue apartarlo de un sonoro manotazo en la cara.
Se incorporó con rapidez y se relajó al ver que habían tenido el detalle de acostarlo en la cama de Baekhyun, pues él los había pillado en la cama del cabeza hueca que aun seguía sujetándose el moflete golpeado.
-¡Estáis liados!- gritó alarmado.
-Sí- dijo Baekhyun ofreciéndole una botella de agua al menor.
-¡Dios!- Jongin se tapó la nariz al percatarse del fuerte olor a sexo que había en la habitación- ¿Porqué…? ¿Desde cuándo estáis saliendo?
-No estamos saliendo- dijo el mayor y Jongin se percató de que el rostro de Chanyeol se entristecía un poco.
-¿Entonces?- preguntó el menor.
Vio como Baekhyun se mordía el labio pensativo y Chanyeol seguía sin hablar.
-Creo que somos compañeros sexuales- dijo de golpe.
“¿Compañeros sexuales?” pensó Jongin, ¿qué burrada era esa? ¿Desde cuándo una persona follaba con su mejor amigo sin más? Él había visto cariño en esas caricias y esos besos, incluso e había sentido un poco (muy
poco) feliz cuando los había visto juntos, pero él decía “compañeros sexuales”.
Era un calificativo muy frío. Chanyeol se puso en pie, alejándose de la cama y bebiendo un gran sorbo de agua, entonces Kai se dio cuenta de que seguía desnudo.
-¿Querías algo de nosotros Kai? –preguntó el mayor aun a su lado.
¿Qué era lo que tenía que reprocharle a Chanyeol? Jongin salió de la cama agarrando al alto del hombro hasta girarlo.
-Hyung ¿Qué era eso que dijiste de los olores?
-¿Olores? –preguntó extrañado.
-Sí, en casa de Suho-hyung.
-¡Ah! –Exclamó recordando – Pues eso, que si te gusta el olor de alguien es que esa persona te gusta.
-Y… -Kai dudó de si debía de preguntar -¿Y si te atrae ese olor?
-¿Si te atrae sexualmente? –vio que Kai asentía –Eso, amiguito es que estas enamorado hasta los huesos de esa persona.
Kai puso los ojos en blanco. ¿Él enamorado de Kyungsoo? No era posible. Sí, lo quería, pero solo como amigo, nada más. Pero también era cierto que no sentía el mismo cariño de “amistad” hacia otras personas, al resto del grupo los quería y punto; pero a Kyungsoo lo quería y algo más… pero nunca había sabido que era ese algo.
Sin decir nada ni escuchar nada salió de la habitación, casi corriendo por los pasillos y por un instante se alegró al ver que su compañero de cuarto no estaba, porque él necesitaba pensar.