Era un día lluvioso, estaba sentada en un sillón el cual estaba junto a una ventana en mi recamara, pensé en todo lo que he echo con mi vida y solloce silenciosamente.
Todo comenzó un lunes por la mañana, era un bello y soleado día, era mi primer día en la secundaria, por lo que estaba un poco nerviosa ya que no conocía a nadie, me adentré al instituto y me dirigí a la oficina del director.
Ya lista me aventuré a mi salón, pero había un problema, ¡no sabia donde quedaba mi salón!. En medio de mi crisis me tropecé con alguien, tenía un torso bastante duro por lo que supe que era un chico, el me miro y con su seductora voz me dijo:-¿Estas bien?.
Era un chico alto con cálidos ojos color verde, una hermosa y sedosa cabellera rubia y una radiante sonrisa.
-Si gracias- Respondí con una voz temblorosa.
El sonrió y me pregunto:
-¿porque será que nunca te e visto por aquí antes?- A lo que yo, con una tonta y nerviosa sonrisa, respondí:
-porque soy nueva.
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Diario de un amor inesperado
Teen FictionTodo es tan diferente cuando uno es nueva en un instituto