sex addicts [l.s] ADAPTACIÓN

No necesito un hombre

Louis se repetía que Harry tuvo que haber tenido una buena razón para irse. Porque no se trataba de un "golpear y correr", ¿verdad? o tal vez se fue porque ya había conseguido lo que quería y quizá no quería estar más con él.

Se dijo a sí mismo que él era un chico fuerte e independiente, que no necesitaba ningún hombre.

Fue entonces cuando se dio cuenta de lo ridículo que estaba siendo. Sacudió la cabeza, Harry era dulce y sabia que nunca haría eso.

Su teléfono sonó en su mesita de noche, lo que significaba que había recibido un mensajede nada mas y nada menos, que del propio Harry Styles.

»Lamento lamento haberme ido con tanta prisa, ¡¡¡pero tengo que decirte algo muy importante!!!Ven a mi casa a la 1, mi familia no está.«

Louis dejó salir un suspiro y volvió a leer el mensaje otra vez. No era una razón válida del porqué lo había dejado solo, pero sus preocupaciones se disiparon al momento que se preparaba para ir a la casa de Harry.

Solo una hora y media más tarde, Louis estaba tocando la puerta de su casa, con la esperanza de que la dirección que le había dado fuera la correcta. Por suerte, Harry abrió la puerta y lo dejó pasar sin decir una palabra cerrando la puerta detrás de el.

"Adivina qué" Preguntó Harry.

"¿Qué?", dijo Louis con una sonrisa tirando de la comisura de sus labios.

Harry se inclinó hacia Louis, quedando tan cerca que le permitía oler el aroma de su perfume. "Mi novio se ha ido", él dijo sin expresión alguna, por lo que se le hizo difícil leer sus emociones.

Louis permaneció en silencio y trató de contener la alegría que sentía correr por sus venas. Le tomó toda su fuerza para no saltar sobre Harry y besar su cara de tonto, en cambio, puso una mueca falsa. "Lo siento, sé lo mucho que lo querías..."

"Está bien", Harry interrumpió, lanzando un brazo perezosamente alrededor de sus hombros. "Porque yo no quería un relación a distancia, de todos modos. Además, se estaba poniendo todo un poco aburrido y monótono; estaré bien."

"Pero, ¿no estabas hablando de lo mucho que lo amabas ayer por la noche? ¿Solo por qué se ha ido, tú estás dispuesto a olvidar todo el amor que sentías por él?", Louis no se quejaba, solo que estaba un poco curioso.

Harry se encogió dehombros. "Voy a tener que hacerlo eventualmente, ¿verdad?"

Ellos dos compartían un gran silencio, ya que ninguno de los dos se atrevía a hablar. Harry se dejó caer en el sofá y Louis le siguió el ejemplo, dejándose caer perfectamente entre sus brazos. Louis se dio la vuelta para que pudieran mirarse a los ojos. "¿Alguna vez te dije lo hermoso que eres?", susurró Harry, acariciando las clavículas del oji-azul.

Sus brazos estaban alrededor de su cintura de forma segura mientras empujaba su camiseta hacia arriba en lo más mínimo, dejando una pequeña porción de piel expuesta. Cerca de la cadera trazaba diseños sobre su piel y lo sentía como un cariño, pero Louis no estaba seguro.

El no sabía que lo que trataba de decirle realmente Harry era «te amo».

Habían tenido esa conexión inmediata, casi como almas gemelas (excepto por el hecho que al principio se habían odiado un poco, pero no vamos a hablar de eso).

¿Se podrían enamorar en dos semanas?

Ellos no tenían ni lamenor idea.

Y ambos tenían sus dudas. Tal vez no era amor, tal vez era la lujuria que estaban viviendo juntos. Tal vez, en el fondo, todavía eran unos adictos al sexo y querían un «golpear y correr».

Si no fuera por como Harry tarareó una melodía suave al oído de Louis y con sus dedos jugaba por sobre la piel de Louis proporcionándole dulces cariñitos en su estómago. Los dos sabían, en sus mentes, que eso era más que lujuria.

Era amor.