Abby Greyman perdió a su madre en un horrible accidente cuando ella apenas era una bebé. A pesar de que jamás la ha visto, sueña con ella constantemente. La llama, le muestra el camino. Un camino que conduce a...¿a dónde?
Abby debe enfrentar a la o...
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"¡Somos fantasmas, criaturas de la noche destinadas a alimentar los temores de los hombres...! "
"Lestat el vampiro" (1985), Anne Rice
La leyenda cuenta que el pueblo de FallStreet, mucho antes de haber sido construído, pertenecía a un descampado mágico en donde se sepultaban cuerpos humanos. Estos seres mágicos, oscuros y quizás otros humildes y vulnerables, se decía que estaban bañados por la luz de la luna, destinados al mal y a la muerte. Por eso muchos de ellos cometían atrocidades ante los humanos, tan macabras y osadas, que llegó un día en el que los mortales se rebelaron. Y así hubo una guerra en la que los humanos ganaron. Se liberó al pueblo de la oscuridad, y por doscientos años tuvo paz.
Leí la historia en cuarto año de la secundaria. Cuando la profesora de Literatura nos hizo escoger un libro que representara algo para nosotros. Papá me había contado que era el favorito de mamá. Pasaba las noches en vela, tratando de buscar signos o "pruebas" que verificaran que la historia fuese real. Entonces...no mucho después, mamá se volvió loca. No sé mucho luego de aquello, porque papá nunca lo cuenta. Pero yo sé que detrás de esa historia, hay una verdad que vuelve psicótico a aquel que la lea.
Y yo la descubrí. O al menos...eso intento. Historias de demonios y ángeles que se asientan en FallStreet con un propósito: recuperar lo que se perdió. Llaves, sellos o lo que sea. Todos existen y caminan entre nosotros. Pero no son iguales a nosotros. Son mucho peores.
Las noches como estas, noches en donde la gente que vive en el pueblo sale a festejar, las calles se llenan de gritos, risas y música por doquier. Hace bastante calor, a eso se le suma el sudor humano y todo lo que conlleva. Se arman ferias en el centro del pueblo, puestos de vendedores ambulantes que cobran mucho más caro productos que puedes encontrar en el año a otros precios.
-Me siento horrible-se queja Isaac a mi lado, con una musculosa negra, jeans negros y zapatillas negras. Si quería pasar desapercibido, no lo hizo muy bien-Nunca vi tanto humanos juntos en mi vida.
-No es para tanto-acoto yo-Además...tienes que acostumbrarte.
-¿En serio?-se toca la piel como queriendo sacarse los gérmenes mortales de encima-Un demonio como yo nunca se acostumbrará a esto. No estamos preparados para lidiar con la mortalidad.
-Relájate-me acerco a un puesto en donde venden pulseras y collares. Gemas preciosas y otras de cuero. El vendedor nos saluda. Alzo un collar que tiene un símbolo raro. De alguna forma, se vería venial en Isaac-¿Qué te parece?
-Ridículo-aleja el collar de su figura, lo deja sobre el mantel de donde lo tomé y tira de mi muñeca hacia otro puesto-¿Aquí nadie vende armas o pociones anti ángeles? Me vendría bien conseguir algo de eso.
-No necesitamos alejar a los ángeles. Necesitamos atraerlos...¿qué te parece esto?-me acerco a una tienda de libros. Tomo uno que en la tapa dice "sobre demonios y ángeles"-Parece interesante.
