El niño se disponía a levantarse de la cama para ir a el baño, ya era muy de noche y un rayo de luz de luna cortaba el cuarto a la mitad.
Abrió la puerta sin hacer ningún ruido, dió dos pisadas fuera de la habitación antes de detenerse y mirar una gran masa de carne que se encontraba tirada en pasillo de la casa.El niño quedó perplejo, le tomo varios segundos antes de darse cuenta que eso que estaba tirado en el suelo, esa gran masa de carne toda comida, era su padre.
Aguanto las ganas de gritar, pero estaba notablemente asustado, tanto que las piernas no paraba de temblarle y un sudor frío le caía por la frente.
Poco a poco una sombra se asomaba por el cuarto de los padres, acompañada de un gruñido que acabo por aterrorizar al niño.Rápidamente se metió de nuevo a su cuarto, tratando de hacer el menor ruido posible. Dió un salto y se cubrió por completo con las sábanas, cómo si eso fuera una especie de barrera que lo protegería del monstruo.
Entre lagrimas pidió y pidió que no lo encontrará, que esa "criatura" no se diera cuenta que estaba despierto. Pobre de el al escuchar esas pisadas acercándose, pisadas mojadas, seguramente de la sangre que se encontraba en el pasillo.
Un rechinido retumbó en toda la habitación, podía escuchar como lentamente la puerta del cuarto se abría, el niño sentía que el corazón le iba a explotar, la criatura se acercaba a su cama. En todo ese silencio el único ruido eran gotas chocando contra el suelo, él no paraba de temblar, pero trataba de hacerse el dormido.
Escucho como la criatura arrastraba una silla hasta dejarla enfrente de la cama, y hay estuvo, el niño no podía verlo pero sabía que estaba hay, mirándolo, esperando a que se moviera.El niño se había logrado calmar un poco, pensó que lo mejor que podía hacer ahora era tratar de dormir, tenía la esperanza de que al despertar no estuviera esa criatura.
Pasaron los minutos y entre gruñidos escucho unos golpeteos mojados, además sintió como un brazo largo pasaba por arriba de él. Pequeñas gotas caían sobre la sábana, al terminar de hacer esto, la criatura estuvo inmóvil, el niño se relajó de nuevo, pero está vez era diferente. Él pudo sentir como esa cosa se metía debajo de su cama, los pelos se le erizaron y bruscamente trago saliva, no sabía que hacer, en su cabeza planeaba levantarse y correr lo mas rápido posible.
¿Pero si esa criatura era más rápida que él? Ya no estaba tan seguro, llegó al punto de pensar en saltar por la ventana, no importaba lo lastimado que terminara mientras que pudiera escapar.Las horas pasaron, el niño pudo ver el destello del sol a través de la ventana, se calmo, pensó que con la salida del sol la criatura ya no se atrevería a salir de debajo de la cama, cómo si el sol fuese un arma para todo lo desconocido.
Poco a poco tomo coraje, lentamente se destapó tratando de hacer el menor ruido posible, su sorpresa fue inmensa al ver que en la silla que la criatura había traído se encontraba la cabeza de la madre, cercenada, sin ojos y con partes de la cara comida.Aguanto las ganas de vomitar pero no pudo contener las lágrimas, la cama del niño se encontraba manchada con sangre, girando la cabeza hacia la pared logro ver algo que hizo que hasta los más pequeños pelos de su cuerpo de erizarán.
En la pared vió lo que la criatura había escrito con la sangre de sus padres;
"Sé que estabas despierto"…..
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Se Que Estabas Despierto
HorrorUn pequeño niño que al despertar vive una de las peores experiencias de su vida.