Cupidon amer. (Felibug) MLB #SanValentín

Cupidon amer

¡Hola bellezas! Lamento mi ausencia, de verdad... Ando con poca inspiración para mis historias e intento escribir de a poco para publicar pronto! :3

Como disculpa aquí les traigo un Especial de San Valentín, dedicado también a mi linda esposa KalpanaRSaotome ❤️ ¡Que sé muy bien que el personaje Félix te encanta! 🌚

Todo lo que es Félix me inspira, prácticamente me identifico demasiado con ese chico, tiene una forma de ser muy parecida a la mía (lo sé, soy una amargada :"v) y me encanta escribir de él y de todo lo que piensa o como ve la vida.

Obviamente este Félix es el Pv, (ósea el original, con sus ojitos grisáceos y su linda personalidad de cordero disfrazado con piel de lobo)

¡Espero que este Especial les sea de su agrado! ❤️ o que al menos los entretenga un poco.

¡Comencemos bellos!

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- "El día de los enamorados" vaya título para un asqueroso día dónde asquerosas personas hacen cosas asquerosamente empalagosas. -murmuró Félix por lo bajo, caminando por el puente donde todas las parejas se juraban amor colocando un candado, de nombre "Pasarela Léopold Sédar Senghor."

Le parecía patético que parejas insulsas se juraran amor eterno con un candado, con la excusa de que jamás podría sacarse.

¿Y si se separaban y querían quitar el condenado candado? ¿acaso no se podía? Porque si, Félix jamás pensaba en positivo cuando de parejas se tratara, siempre pensaba que las relaciones amorosas eran efímeras.

Claro, eso cambiaba con Ladybug... ¡Pero no cambiaba su mala suerte pues no era correspondido su amor! Así que seguía odiando a San Valentín y a todos los candados habidos y por haber.

Félix era una persona incomprendida, jamás exteriorizaba sus sentimientos y siempre le gustaba dar un perfil de chico cruel, frío, soberbio y arrogante, cuando en realidad, cada vez que algo malo pasaba, ayudaba a escondidas, para que nadie jamás supiera sus buenos actos.

El rubio de hermosos ojos grisáceos estaba convencido de que siempre debía vivir en soledad, así que jamás expondría sus buenos actos y su ayuda, porque tampoco quería ser amado por las personas ni mucho menos quería ser considerado como una persona sensible y con empatía.

Por eso, cada vez que algo malo ocurría, prefería ayudar a las personas a escondidas hasta que resolvieran sus problemas y así... Aportarles un poco de felicidad.

- ¡Eres un idiota! ¿Como olvidaste un día tan importante como este? -gritaba una muy indignada y enojada mujer de cabello rizado al que parecía ser su novio, Félix no pudo evitar agudizar su audición para escuchar.

Definitivamente Félix no era como todos pensaban, a él le gustaba ayudar sin que las personas se dieran cuenta de sus actos para mantener su perfil de chico cruel y solitario.

Pero había solo una persona que notaba cada cosa de él y esa era Bridgette, ella sabía muy bien sus silenciosos actos de bondad y eso hacía que se enamorara más de él.

"Pues... Si no me va bien en el amor, ¿por que no ayudar en el romance este día tan empalagoso?" Había pensado él mientras observaba a la pareja pelear en un día "maravilloso" como el San Valentín.

No sería el dulce cupido del amor, pero al menos... Sería un Cupido Amargo.

Así que se preparó para comprar todo lo necesario para su misión, mirando como la mujer dejaba a un muy entristecido chico.