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Realmente no se cuando comenzó, lo llegué a mirar en algunas ocasiones, son recuerdos difuminados en mi mente... lo veía tocar el piano, llamaba demasiado mi atención pero no me percataba de aquello.

Jonathan era su nombre, tiempo después lo descubrí. El vivía a una hora de mi casa, realmente algo lejos, así que lo veía muy poco. Él tenía algo que llamaba mi atención, era callado, serio, tímido quizá, educado, amaba su seriedad, la verdad es que atrapaba mi atención.

Hubo un campamento, llegué con mis amigas, fuimos a recorrer el bosque, era demasiado hermoso, cuando llegamos al campamento, él estaba ahí, mi mente lo ignoraba pero mis ojos lo buscaban, una noche del campamento con la lluvia mojándonos, nos presentarón, él no era un chico guapo, pero llamaba mi atención, nunca se lo dije a nadie. 

Mis amigas morían por hablar con el conocerlo hasta conseguir su número con tal de estar en comunicación con el, me pidieron mi teléfono para conseguir el de él, sin dudarlo acepte. Habló con alguna chica linda toda la noche, era obvio... el era músico "popular" como podría hablarle a alguien como yo.

Al finalizar el campamento llegando a casa no sabia que hacer, tenia su numero pero dudaba al escribirle, paso el tiempo... le escribí, comenzamos a charlar, el se mostraba indiferente, pero llamabas más mi atención, todos los dás le escribía, él muchas veces no contesto.

Le dije "Te quiero Jonathan" simplemente me ignoro, para ese entonces no sabia que hacer, así que seguí insistiendo, en verdad me gustaba, lo quería o quizá eso imaginaba yo... llego la noticia que tanto temía... él tenia novia. Una chica linda, de su escuela, el después me lo confirmo. Yo no tenia porque decirle nada, el núnca me dio esperanzas sino tiempo después, pero con la noticia me sentía más atraída a él. Comenzamos a hablarnos bien, a ser amigos, pero a mi me interesaba más, nunca se lo dije.

Con el paso del tiempo intentamos formar una relación, siempre terminábamos peleándonos, por tonterías, por la distancia, por amigos, pequeños detalles que a mi me hacían sentir mal, le aguanté todo... Me estaba enamorando.

Un 6 de mayo íbamos en un autobús juntos, se acerco a mi, me miro, me agarro de las manos... y llego la pregunta tanto anhelada por los 2... ¿Quieres ser mi novia? Mi rostro se lleno de felicidad, no dude en responderle, le dije que si, era el mejor día de mi vida. 

Algún díaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora