Jungkook ha escuchado un montón de veces a su mejor amigo, SeokJin, decir que él necesita algo dulce en su vida. ¿Y por qué no llevarlo a una tienda de dulces donde capaz que conozca a su alma gemela?
❝─¡Bienvenido a Sweet Place! ¿Qué desea ordenar...
Su mirada estaba fija en el espejo, viéndose a sí mismo en un traje blanco contrastando con una corbata negra, teniendo a dos chicos atrás suyo soltando chillidos de emoción mientras él sufría unos nervios incontables.
─ Tranquilízate Hobi, ni que fuera algo malo casarse ─ Mencionó Jimin, sosteniendo sus hombros para que deje de temblar por la emoción y los nervios, así Taehyung tendría también la tarea fácil de arreglar su corbata y su cabello.
─ Estás precioso Hobi Hobi, seguro que en el momento que entres ahí Jungkook se le caerá la baba por lo hermoso que estás ─ Rápidamente su sangre subió a sus mejillas, volviéndolas rojas por la vergüenza ante las palabras de su amigo.
─ No se si Jungkook quiera casarse con alguien tan tímido como yo, ¿y si a último momento decide negarse? ¿Qué hago? ─ Sentenció, dejando el cuarto en completo silencio, hasta que Jimin (completamente indignado) habló.
─ ¿Cómo puedes pensar eso? Jungkook definitivamente quiere casarse contigo y no lo digo yo solamente, también te lo puede confirmar Namjoon, YoonGi, SeokJin, TaeTae e incluso el mismísimo Jeon Jungkook, tu, en unas horas, esposo. Así que deja todos esos pensamientos negativos antes de que me retracte de darte una cachetada por ser tan negativo ─ Las ganas de echarse a llorar eran inmensas, pero no quería arruinar el trabajo de sus amigos que hicieron para dejarlo más hermoso de lo que ya era, así que simplemente sonrió y abrazó a sus dos amigos por ser de gran ayuda con su estabilidad emocional.
─ Gracias chicos, en serio gracias
─ Si, si, sólo no te pongas a llorar como marica en mi hombro, arruinaras mi traje
─ Jimin, cállate, ¿quieres?
─ Cállate tú, zopenco ─ Antes de cualquier estúpida pelea se iniciara, Jin entró al cuarto estrepitosamente con una sonrisa; preparado para anunciarle a Hoseok que ya era hora.
─ ¡Vamos Hoseokie! Tu futuro esposo te está esperando ─ Fue alejado del abrazo y guiado hasta el altar, donde Jungkook lo esperaba. ─ Y ustedes dos, andando, son los padrinos de la boda ¿no? ─ Al terminar de decir eso, Jimin y Taehyung reaccionaron rápido y salieron corriendo hasta el altar donde esperarían a Hoseok cuando se presente.
Respiro profundo. Se dijo a si mismo que tenia que calmarse y dejar de pensar en cosas negativas de lo que probablemente pasarían ese mismo día.
─ No te presiones tanto pequeño ─ Le susurró Jin cuando estaban frente a la puerta, esperando a que la música suene para hacer su entrada. ─, entiendo tu sentimiento al igual que Taehyung también lo entiende, cualquier cosa puedes decirnos lo que te molesta o preocupa. Cuenta con nosotros. ─ Tras decir eso le guiñó el ojo, le agradeció con una sonrisa y justo en ese preciso momento la música empezó a sonar.
Los nervios habían vuelto, sus manos sudaban y no dejaba de morderse el labio.
Sintió como ponían su brazo con otro. Alzó la vista, y al ver a Jin supo que le estaba dando fuerzas para calmar sus nervios constantes. Así que volvió a sonreír y puso su vista al frente, ya que las puertas habían sido abiertas de una patada de parte de Jin, quien no quiso esperar hasta que los encargados vinieran y abrieran la puerta por ellos. Pero raramente nadie le presto atención a ese detalle y siguieron como si nada, incluso Namjoon.
Empezaron a caminar por esa roja y larga alfombra hasta Jungkook, que esperaba a su prometido con muchas ansías, y verlo ahí, con ese traje blanco y su bella sonrisa que marcaba sus hoyuelos; pensó que era realmente un ángel con el que se iba a casar. Pero Jung Hoseok realmente era un ángel, y es aun mejor porque era su ángel, su único ángel; al cual amará hasta que él mismo se canse.
Cuando Jin dejó a Hoseok al lado de Kook rápidamente fue a sentarse al lado de Nanjoon, su esposo, dejando a los dos tortolitos ahí arriba. Taehyung, quien estaba atrás suyo, y Jimin; atrás de Jungkook, estaban incluso más emocionados que todos los presentes ahí porque era el momeno en donde por fin sus dos queridos amigos se unirían completamente con tan sólo decir "acepto".
Ese preciso momento en donde el juez empezó a decir sus palabras, Hoseok estaba feliz de estar ahí, al lado de la persona que amará por toda la vida y jurará protegerlo de cualquier cosa; él iba a ser la luz que ayudará a Jungkook con sus miedos, inseguridades, tristezas y preocupaciones para toda la vida.
Llegando el momento de ponerse los anillos, el juez musitó las palabras que todos querían escuchar.
─ Ahora el novio puede besar al novio ─ Con los gritos, aplausos y silbidos de fondo juntaron sus labios después de esperar tanto tiempo a que el juez terminara de decir esas únicas palabras que necesitaban escuchar. Amaban la sensación de que sus labios estén juntos, pero tuvieron que separarse y al hacerlo se miraron con amor en sus ojos que no les importaba que Jin y Namjoon estén cerca de ellos con una cámara grabando el momento, ni que Jimin y Taehyung se encuentren tirando pétalos arriba de ellos para que la grabación sea espectacular, ni que YoonGi sólo este tirando brillantina para acompañar a los pétalos; claro que no, era tan único ese momento que se olvidaron de todo y se centraron en amarse hasta que sean unas viejas pasitas.
─ Te amo ─ Musitó Jungkook, acariciando lentamente su cintura.
─ También te amo ─ Respondió, para luego volverse a besar con todo su amor. Y era seguro que ni locos iban a dejar de amarse, ni aunque el mundo lo quiera separar.
─ Oh por dios, son tan gays.
─ Cállate Taehyung, tu también lo eres.
─ Joder, me están arruinando mi momento con mi esposo ─ Dijo Jungkook irritado, con su ceño fruncido amenazante, mientras abrazaba Hoseok y este le daba caricias en su cabello.
─ No me mires a mi, Tae tiene la culpa ─ Con su pulgar apuntó al castaño, quien aspiro aire dramáticamente.
─ ¿Cómo puedes acusar a tu propio esposo, Min YoonGi? ─ Puso su mano en su pecho mientras recibía palmadas de Jimin en su espalda como consuelo. Y ahí empezaron a tener una pequeña discusión en la cual trataba sobre lo malo que era YoonGi con Tae, de haber arruinado el momento de los recientes casados o de porque Jimin aún no crecía lo suficiente como para alcanzar los cereales del estante de arriba.
Si nos ponemos a pensar, ellos nunca cambiaran, seguirán siendo ese grupo loco hasta que el tiempo decida que hacer con esos chicos alborotados.
「Fin」
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¡terminado!
ya era hora, tenía tantos momentos de crisis existenciales que no pude seguir por un tiempo.
agradezco que leyeran esto, la próxima publicación será un agradecimiento a las personas que leyeron esto.
