Deseas con ganas que las paredes,
Saquen sus más filosos cristales,
y rasguen el frío y árido cuerpo,
Al igual que el libre hálito.
Es más llevadero que sentir,
Como aquella voz al partir
Te viste, pinta y te diseña,
Cual corazón triste se empaña.
oh niña
Que desconoces que tanto duele.
Preñas el pecho de alfileres;
Desgarran estas extensas venas
Y se despilfarra la tristeza
De haber leído y entendido
Que ese destello en sus ojos
Eran las más filosas agujas,
Abría afilado las garras;
Con ellas mis ojos, arrancado.
D. Alexander M. G.
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Fugaz instante (timón del momento)
PoesiaPoemas que han nacido pequeños y delgados, entre frías y cruzadas banquetas, de un parque de hojas secas, en presencia de las huellas de la lluvia, el paso tranquilo de la noche, entre cuchillas y garganta. Otros por cargar a sus hombros la prisa, d...
