Aprendiendo a ser romantico [L.H]

Capitulo 6: Drogadictos

La luz del día había provocado que despierte, ya que los rayos de sol me traspasaba por los ojos. Mire a Evelyn quien aun seguía dormida en la misma posición en la que se durmió anoche. Se veía tan linda durmiendo de esa forma, que no quería despertarla. Pero tenía que, ya era de mañana, no sabía la hora exacta pero estaba seguro de que no faltaba mucho para empezar las clases. 

Puse mi mano por encima del hombro de Evelyn y la sacudí despacio, sin ser demasiado brusco. Evelyn me respondió con una mueca y se acomodo nuevamente. Aun seguía sobre mí, por lo que tampoco podría conducir así.

Volvía a sacudirla esta vez un poco más fuerte.

-Evelyn, despierta ya -le dije- es hora de ir al instituto.

-¿Qué hora es? -Dijo aun con los ojos cerrados. Moviéndose lentamente para incorporarse.

-No tengo idea, pero ya es de mañana.

Evelyn se sentó en su lugar y abrió los ojos. Se miro en el espejo del auto y abrió los ojos como platos. Inmediatamente empezó a arreglarse el cabello, y se saco con los dedos el delineador que tenia por una de sus mejillas. 

Me reí al ver su cara de espanto cuando noto que tenía un nudo en el cabello.

-¿De qué te ríes? -Me preguntó con el ceño fruncido.

-De nada. -Dije serio, tratando de no reír. 

La verdad es que me daba mucha gracia como intentaba verse bien luego de dormir en un auto. Mas allá de que su poco maquillaje estaba por debajo de sus ojos, se veía bien. Y me daba mucha gracia ver que se preocupaba demasiado por un nudo en el cabello que no se le notaba para nada. Evelyn era hermosa con o sin maquillaje, dormida o trasnochada. 

Cuando ya había terminado de arreglarse, me me miro. Y me atapo viéndola.

-¿Qué?

-Nada. -Evelyn me miro confundida, y yo no sabía cómo hacer para disimular, así que dije lo primero que se me vino a la cabeza.

-Supongo que ya es hora de irnos.

-Luke, desde hace horas, que es hora de irnos.

Quería matar a mi subconsciente.

-Bien, ¿puedes ver algo? -me aclare la garganta- ¿Algún camino?

Evelyn entrecerró los ojos y taro de ver mas allá de los arboles. 

-¡Por ahí!  -dijo señalando al frente- Creo que es un camino. Tal vez nos lleve al centro.

De inmediato encendí el auto y empecé a conducir. Cuando ya habíamos llegado al camino que ella había visto, empecé a conducir a una velocidad moderada. Pensando que Evelyn no querría ir tan fuerte... a pesar de la hora.