Needy

So needy

Único

El celo, esta época de calor y deseo sexual alto en los omegas, tan placentero y a la vez tan doloroso si no se tenía una compañía para pasar tan tortuosos siete días, pero ¿Qué pasa cuando tienes compañía de sobra?

Ese era el caso de Yoongi, muy probablemente el omega más precioso de todo Daegu, con piel de porcelana, cabello negro azabache, unos bellos ojos verdes y un exquisito aroma a naranja y rooibos simplemente hermoso y exquisito, no solo para un alfa sino para 3.

Y justo ahora Yoongi se encontraba en el centro de esa cama king size, su celo había llegado justo por la mañana, después de que sus alfas fueron a trabajar, desde entonces ha intentado mantenerse tranquilo, haciendo ejercicios de respiración o duchándose rápidamente cada 15 minutos, pero después de revisar el reloj constantemente ahora esperaba sentado, sin tocarse como buen omega que era, esperando ser atendido por sus alfas porque si se tocaba sabia que recibiría un castigo, y Yoongi no quería recibir un castigo, al menos no por ahora.

Entonces cuando escucho el sonido de las llaves entrando en la cerradura de la puerta principal de su casa y las voces de sus alfas, se sintió en la gloria, incluso podría decir que su entrada lubrico el doble, al fin recibiría la atención que llevaba necesitando desde que despertó. Escucho como abrían la puerta, como esta se cerraba, cada segundo se volvía más tortuoso, escucho como las voces cesaban, luego escucho esos lentos pasos por el pasillo y apenas pudo percibir el olor característico de cada uno de sus alfas su boca se hizo agua, sus piernas se abrieron involuntariamente y sintió como más lubricante salía de su entrada hasta mojar la sabana y el colchón bajo el. Yoongi de verdad estaba necesitado.

La puerta de la habitación finalmente se abrió y el aroma de cada alfa lo envolvió, primero el limón con jengibre de Hoseok, después la tierra mojada con durazno de Taehyung y por ultimo y mas potente de todos el olor a sándalo y madrea de Jeongguk, todos esos aromas juntos hacían una extraña pero perfecta combinación que lo hacia sentir drogado y mucho mas sensible de lo que ya era por su celo, era como si le hubieran inyectado una dosis extremadamente alta de afrodisíacos, logrando nublarle la vista con absoluto deseo, como si una lujuria pura y descomunal abordara su cuerpo.

-Gigi

Ni siquiera pudo responder con palabras, lo único que salió de su boca fue un gemido y lo más que pudo hacer fue apretar más las sábanas entre sus manos y abrir más las piernas para exponer la humedad bajo el, de verdad se estaba conteniendo para no restregarse contra algo para darse aunque sea un poco de placer, no sabia cuanto mas podría soportar, era una terrible tortura que sabia sus alfas disfrutaban. Y como no, si ante sus ojos tenían a un Yoongi cubierto solamente con una camisa blanca probablemente tres tallas más grandes que la suya, con esas largas y blancas piernas abiertas a más no poder, con manchas grandes de lubricante en las sabanas, los ojos cristalizados y su aroma a excitación expandiéndose en el aire como si no hubiera un mañana. Yoongi en celo era tan apetecible.

-¿Has sido un chico bueno mientras no estábamos Gigi?- Pregunto Taehyung

Por supuesto que había sido un chico bueno, Yoongi siempre era un chico bueno, así que no dudo en asentir de forma rápida.

-Gigi ha sido un omega muy muy bueno, Gigi no se a tocado desde que despertó, ha aguantado porque quiere que sus alfas se ocupen de él.

-Entonces Gigi merece un premio por ser un buen omega verdad. -Murmuro Jeongguk

Yoongi solo atino a asentir como respuesta, no podía articular palabras correctamente, así como tampoco pensar bien, él quería su premio y más pronto que tarde sintió algunas partes de la cama hundiese por el peso de los alfas, así como unos labios que se dedicaban a morder sus piernas y muslos hasta llegar a su pene, un par de manos traviesas que amasaban sus nalgas y jugaban con su sensible entrada, y por último otro par de labios que estaban pegados a los suyos en un beso ferozmente placentero, no sin antes haber sentido 3 narices oliendo su piel para inhalar lo más posible de esa esencia tan embriagante, al fin Yoongi tenía atención que necesitaba.