¿Tú cómo definirías la locura?
¿Qué es exactamente?A decir verdad, es una pregunta bastante ocurrente;
Ya que algunas personas podrían llamar "loco" a alguien que en su trabajo tomó un riesgo que al final lo llevó al éxito.Pero otros podrían llamar loco a alguien que abre un estómago y saca un riñón con el anhelo de saber que sabor tiene.
La locura tiene muchos significados y contrastes, cada quién sólo la define como más le conviene.
Y es que...¿Es qué acaso todos estamos locos?
¿Todos somos unos dementes y cada quién lo representa a su manera?
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Nagisa Shiota, un joven de a penas veintidós años, bien vestido, piel pálida y ojos azules, yacía delante de aquel cadáver que teñía de sangre su cabello y pechos. El detective miraba con detenimiento aquellas marcas de agresión ejercidas hacía tan sólo unas cuantas horas.
Rachel Belier era su nombre.
El cuerpo aún se veía en buen estado, no calculaba que pasará de las doce horas en que fue asesinada.
La muchacha tenía una parte de su cabello castaño mal cortado hasta su hombro aún cuando originalmente parecía llegar hasta el borde de su cintura, las cuencas de sus ojos estaban profundamente pintadas de negro, aunque precisamente no se veía como pintura o maquillaje, parecía que aquel contraste era parte cien por ciento de ella.
Tenía una piel sumamente pálida y labios resecos. Tal y como si no hubiese tomado agua durante varios días.
Eso, sin contar las veinticinco puñaladas que había recibido de forma brutal en su estómago y dos en su pecho.
Nagisa volvió su mirada a la oscuridad del lugar, —El sol recientemente estaba saliendo.— Y notó las velas negras colocadas a lo largo de la habitación. En el centro había un espejo roto, a lado de este un cuchillo llenó de sangre, probablemente de la víctima.
—No hemos encontrado nada.— Un policía entró a la habitación, se le veía calmado.—. Ninguna de las cerraduras fue forzada.
—¿Y las ventanas? ¿Las investigaron también?— Shiota preguntó.
—Sí, todo. Pero no hay señales de que alguien haya entrado aquí por la fuerza. Tampoco hay marcas, el lugar está limpio de todo ADN independiente.
El joven extrañado asintió y el policía volvió a salir de la habitación.
Aquello era realmente confuso, ya que entonces aquel asesinato se había dado dentro de la residencia, sin embargo, no había nadie más.
Parecía que la chica vivía sola, pues no se encontró ninguna pertenencia que no fuese de ella. Además era imposible que el asesino hubiese huido de tal forma sin dejar algún rastro.
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Tarte à la viande | KarmaGisa
Mystery / Thriller◇-A partir de ahora tú me perteneces.- El joven bajo sus pies se vio despavorido, todos sus vellos se erizaron ante la caótica mirada color vino sobre su ser. ◇-¿Qué? No... ¿Por qué...? ¿...Por qué yo? ◇-Fuiste tú el que primeramente me llamó, ahor...