Siempre trato de escribir, lo que siento o dejo de sentir. Es extraño darte cuenta todo que puede cambiar en un abrír y cerrar de ojos, y no lo digo por la pubertad, o por la adolescencia, lo digo por la forma de pensar, por la forma en la que sentimos, por la forma en la que vemos el mundo.
Mi madre siempre dice que todos tenemos un poder especial dentro de nosotros, algo que nos dio Dios al momento de ser concebidos, y que eso nos ayudaría a lo largo de nuestra vida; en realidad, yo creo que esas son puras patrañas, Dios es un niño con una granja de hormigas, no planea nada.
Al menos, eso creí...