вы шестнадцать

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—Shouto, por favor...


Rogó con desesperación clara en su voz mientras veía como el chico que amaba no mostraba diferencia en su fría expresión, tan indiferente a sus palabras y su presencia, tan indiferente a él.

Un golpe demasiado fuerte y, que aunque se alcanzó a cubrir, lo mando varios metros lejos quedando en el suelo inmóvil. Se quejó sin poder levantarse, sus párpados se negaron a subir por completo y su vista era borrosa, su espada estaba a su lado sin poder empuñarla. No se atrevió a cerrar los ojos, miró fijamente el rostro que se encargaría de acabar con su vida, una pequeña sonrisa se formó.


—¡Katsuki!


Ese grito estridente hizo que tanto Shouto como él se giraran hacia el recién llegado, Izuku corría hacia ellos envuelto en sudor y con una gran espada en la mano, sus ojos verdes miraron la escena sin comprender  lo que sucedía.

Shouto lo miró fijamente, la frialdad y la maldad que transmitían sus ojos hizo que Izuku se congelara, incapaz de llegar hasta Katsuki que apenas había logrado sentarse, miró al rubio con preocupación y empuño la espada con fuerza dispuesto a actuar.

—¡Oh, ya veo!

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—¡Oh, ya veo!


Shouto comenzó a reír de forma maniática, Izuku frunció el ceño confundido mientras daba pasos lentos y temblorosos hacia el lugar del rubio, Katsuki mantenía la mirada en el bicolor que los miraba de uno al otro volviendo a reír ¿Qué le sucedía? ¿Qué era lo gracioso?

No tuvo oportunidad de preguntar, la respuesta llegó de una forma que nunca esperó.


—Qué interesante. No esperaba que fuera tan pronto, pero todos los seres humanos son así, ¿no?


¿Por qué lo decía como si él no fuera un ser humano también? Izuku llegó a su lado e intentó ayudarlo a levantarse, se negó, lo empujó con brusquedad haciéndolo retroceder y fruncir el ceño molesto. Katsuki bufó al escucharlo hablar, regañandolo como si tuviera derecho a hacerlo, no era el momento para ello pero realmente le molestaba su presencia.


—¡Por favor, solo quiero ayudarte!


—¿¡Qué mierda crees que haces!? ¡No necesito tu maldita ayuda!


—Es bueno ver que encontraste un reemplazo, no es bueno vivir apegado al pasado.


¿Reemplazo?

¿A qué se refería Shouto con eso?

Lo miró levantándose con dificultad mientras volvía a alejar a Izuku de su lado, realmente era terco, lo irritaba en sobremanera. No tomó su espada, no lo creía necesario, además no le serviría de nada, no era capaz de dañarlo. El peli-verde vio como Katsuki comenzó a caminar hacia aquel demonio extraño, dio unos pasos dispuesto a seguirlo pero la mirada rojiza le dejó en claro que no lo hiciera, apretó los labios frustrado.


демон [Todobaku] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora