El Chico de Enfrente - WowKwan (A.C.E)

아홉

Me encontraba cenando con mi hermano en el comedor de la casa. Como siempre hacía desde que llegué aquí, le contaba todo lo que me pasaba en el día a día. Y para ser francos los últimos días el tema principal de conversación siempre ha sido el mismo chico.

- Su nombre es Sehyoon no?

- Sipi, él mismo me lo dijo. Claro me pudo haber mentido, pero confío en él

- Cómo puedes confiar en una persona que apenas conoces ByeongKwan? no es algo natural.

- Simplemente siento que no tiene motivos para mentirme. Además es un nombre súper lindo no crees? Al igual que él - Donghun me quedó viendo unos segundos con los ojos entrecerrados - Qué?

- Sabes que creo? Te estás empezando a enamorar de ese chico, y realmente no te conviene hacerlo

- Claro que no! Sólo..quiero ser su amigo DongHun. Eso y nada más

- Sí claro Byeongkwan, su amigo solamente - mi hermano se levantó de la mesa para dejar la vajilla en el lavaplatos - aún sigo pensando que no deberías ni siquiera hablar con él. No sabemos si lo que dice la gente pueda ser cierto, debes tener cuidado

- Nada de eso es cierto hyung, no es posible que ese lindo chico llegue a hacer algo a malo

- Caras vemos, corazones no sabemos Byeongkwan. Qué pasa si resulta ser un anticristo?

- Si es así, me encantaría ser el novio del anticristo

- Ves, si te gusta, y mucho por desgracia

- No me gusta! Pero suena un poco interesante

- Ya vendrás a mí cuando ese demonio te quiera llevar al infierno

- Pues obviamente DongHun, debo pedirte permiso primero antes de seguirlo allá - mi hermano negó con la cabeza y se retiró del lugar.

Al subir a mi habitación vi a mi chico desde la ventana, guardaba algunas cosas hasta que notó mi presencia y dirigió su mirada a mi. Le sonreí y saludé con la mano, pero este sólo se dio la vuelta y siguió acomodando algunos libros del estante. No me iba a dar por vencido tan fácilmente por lo que busqué un papel y un marcador para escribir un mensaje; luego lo agarré con ambas manos colocándome frente a su ventana nuevamente.

Empecé a hacer sonidos para llamar su atención, pero no daba resultado así que decidí mencionar su nombre a lo que volteó rápidamente leyendo lo que tenía en mis manos.

"¿Quieres ser mi amigo?"

Él sólo negó con la cabeza y se retiró de la habitación