Corazón De Hielo(Completa-En Edición)

56.-En la habitación

Estaba sentado en un sillón bastante cómodo.
No sabía cómo empezar,estaba feliz por haberlo encontrado y en sus ojos,notaba al menos que no le molestaba su presencia.
Le miró por unos segundos en los cuales su vida podría haberse esfumado. Su corazón latió como nunca. No entendía porqué,la sensación era agradable y tan sensacional.

Sonrió de lado y se animó a hablar primero.

-Necesitaba verte...-dijo.- Pensé que podíamos empezar de nuevo,con eso de que estamos vivos y poder hacer otras cosas aparte de quedarnos en el santuario. No sé si estés de acuerdo pero.. creí que podríamos hablar sobre nosotros.

-Un gusto que estés aquí, entonces, ¿Que quieres hablar? Viajaste horas cuando tienes una flojera del mismísimo infierno.-
Camus sonrió y se acercó a Milo sentándose a su lado.-Yo también necesitaba verte.-continuó.-
Perdóname por haber sido duro contigo.
Entiendo lo que te he hecho pasar por mi culpa.
Pero era necesario..

-correcto..
Este...
Dejemos eso.
-dijo tratando de mostrar su negación al mencionar exactamente ese tema.-no me siento muy cómodo digamos que justamente por la delicadeza de aquellos días.
Pero dime,que se siente vivir en una mansión tan grande como esta.-preguntó asombrado mirando el techo y el gran candelabro que les brindaba la luz.

-En realidad,no es tan emocionante. Prefiero los lugares más pequeños.-contestó.- Admito que mi recinto en el santuario era agradable y mucho más confortante.

-¿Bromeas?.-dijo incrédulo.- ¡Este lugar es gigante! me siento como una pequeña hormiga en la jaula de Cancerbero.
Me siento pobre ante tí amigo..-hizo ojitos y dobló sus labios de manera chistosa.-seguimos siendo amigos¿O no?

-Podemos ser lo que prefieras.-susurró ocultando lo más disimuladamente su timidez.-yo no quería lastimarte. De verdad.
Solo..buscaba la manera de excusarme para cumplir en lo que me decidía.
Y al darme cuenta de esta nueva oportunidad con vida,yo quisiera dejar todo atrás.

-Te olvidaste de mí,me dejaste en el santuario y definitivamente no contaste a nadie a donde ibas. Yo también soy tu pasado que quieres dejar atrás?.
Aveces te portaste muy cruel conmigo.-hizo una mueca de tristeza.

-No quise dejarte atrás.. Quise darme mi propio espacio. Lo necesitaba. Además,el fingir no tener sentimientos en ocasiones conlleva al sufrimiento de uno mismo.
Y tortura de una forma impensable la mente y los recuerdos.
No fuiste el único que sufrió.

El griego sintió algo de pesar en las palabras de Camus. ¿Pero qué sentido tenía abrir aquellas heridas que tardarían en sanar?
Lo mejor sería que cambie el rumbo de la conversación lo más pronto posible. O todo..se iría a una probable discusión.

-Puedo quedarme aquí esta noche?
Supongo que el dinero que traje no es suficiente para conseguir una casa en renta,y mucho menos al amanecer.

-Si..
Cómo vez, aquí no hay nadie aparte de nosotros.
Hay varias habitaciones vacías. Cajas,muebles,ropa que ha quedado guardada por años.
Puedes quedarte en la habitación al lado mío.
No sabes lo bien que me hace recibir una visita.

-aunque sea en la madrugada?

-Eso no importa,estaba despierto.

-Me gusta como te ves.-soltó en cuanto el francés se puso de pie.-esos pantalones marcan tus piernas de manera sensual.

-Que tratas te hacer?.-le cuestionó mirándolo de lado.

-Nada en específico. Digo..
La única forma de liberarse de una obsesión es caer en ella.
Y tú,eres mi obsesión.

-Milo,basta..

-Lo dije en voz alta o lo pensé?

-Olvídalo. Ven conmigo.