Una semana después…
El tráfico a la hora de comer era terrible, todo el mundo estaba deseando llegar a sus casas para comer algo después de tanto tiempo de trabajo, y ella era una de ellas. Su cabeza todavía daba vueltas con lo que había pasado hace una semana, con dos de sus alumnos, no podía evitar reír al mencionarlos como alumnos de ella, se le hacía bastante raro, pero era la realidad y siempre se tiene que afrontar la realidad y evitar sus miedos. Ninguno de los dos se le había acercado al transcurrir esta semana, por fin era viernes, y tenía el fin de semana por delante, tenía que entretenerse con algo antes de que su cabeza volviera a estar llena de dudas y preguntas sobre el por qué de sus actitudes hacia ella, y si están ignorándola como castigo.
Sonrió al estar frente a su casa, y aparcó su coche enfrente. Al entrar por la puerta de su casa, dejó su bolso y chaqueta en el perchero y suspiró de cansancio, se descalzó dejando los tacones en el mueble zapatero y caminó a la cocina para hacerse algo de comer pero al darse cuenta que no había echo la compra desde el lunes, llamó por teléfono a su sitio preferido de comida rápida a unos veinte minutos de su casa.
Ocho minutos después…
Se encontraba sentada en el sofá con la mirada fija en el televisor que se encontraba frente a ella, cuando el sonido del timbre le llamó la atención, miró la hora.
-Que pronto ha llegado… -Se encogió de hombros y se dispuso a abrir la puerta.
Sonriente abrió la puerta pero la sonrisa se le borró al ver a Justin en el porche de su casa, con la cabeza cabizbaja mirando sus pies, ella carraspeó la garganta llamando su completa atención.
-__________… -Susurró, audible.
Ella sin ninguna expresión facial, habló. -¿Qué quieres?
Él hizo una mueca ante su dureza al hablarle. -¿Puedo hablar contigo, un segundo?
Ella negó con la cabeza. -Estoy ocupada…
Justin habló antes de que le cerrara la puerta en la cara. -Lo siento, de verdad.
Ella frenó su acción, y volvió a abrir la puerta. -¿Qué sientes?
-Siento haberme comportado contigo como si fueras un juguete para nosotros, también siento que Ryan se haya enfadado contigo porque me acosté contigo, y siento haberte ignorado toda esta semana, solo necesitaba pensar…
Ella frunció el ceño. -Lo de Ryan fue mi culpa, no la tuya…
Él negó con la cabeza. -Si no hubiera venido a tu casa, no hubiera pasado lo que exactamente pasó entre nosotros, no te eches la culpa cuando yo verdaderamente tengo la culpa de todo lo que está pasando entre los tres.
-Cada uno es responsable de sus actos… -Comentó ella.
Justin asintió con la cabeza. -Losé y estoy de acuerdo en ello.
Ella suspiró, y abrió la puerta más, para que pudiera pasar. -Anda, pasa…
Él volvió a levantar la cabeza y sonrió entrando por la puerta, mirando a su alrededor, la última vez con lo que había pasado entre ellos, no había tenido tiempo de admirar el interior de su casa, era realmente agradable a simple vista. Giró su cuerpo y se fijó en el pequeño pero maduro cuerpo de ella, quién se mordía el labio inferior mirando un punto fijo de la pared que tenía a sus espaldas.
-¿Te ocurre algo? -Preguntó Justin, preocupado.
Ella salió de su ensueño y respondió con otra pregunta. -¿Puedo hacerte una pregunta?
Él algo confundido asintió con la cabeza. -Claro…
-Dime la verdad, ¿Por qué cambiaste conmigo?
Justin suspiró al oír su pregunta y negó con la cabeza.
-Por favor, necesito saberlo…
Él tragó saliva y se dispuso a contestar a la inquietante pregunta.
-Solo intento no enamorarme de ti…
El pulso de ella se paró, al igual que su corazón que iba disminuyendo con el tiempo, el mundo parecía haberse parado a su alrededor, y solo existía él, quién al parecer estaba tan nervioso que no paraba de mover los dedos de sus manos, era realmente adorable cuando se lo proponía. Ella intentó formar una sonrisa, pequeña, sin saber que decir, se acercó a él, sigilosamente, él estaba con la mirada en el suelo y al notar su presencia levantó la cabeza, fijando su mirada en ella.
-¿Tienes miedo? -Preguntó ella, llevando una de sus manos a su cuello, acariciándolo.
Él asintió con la cabeza. -Siempre le he temido al amor y más ahora.
-Creí que Justin Bieber no le temía a nada. -Comentó ella, provocando su risa.
-Todo el mundo le tiene miedo a algo… -Se encogió de hombros, pasando una de sus manos alrededor de su cintura, acercándola a él. -…y en mi caso eres tú. Mil veces sentí deseos de acariciarte, y mil veces me quedé quieto, sin hacer nada. Estaba un poco confundido; quería decirte que empezaba a sentir millones de sentimientos por ti, pero no sabia cómo empezar. Tengo miedo de enamorarme de ti, pero creo que es una batalla perdida ya que estoy locamente enamorado de ti, _____________ y eso es un problema.
Los latidos del corazón de ella empezaron a tomar un ritmo increíblemente rápido, parecía querer salir de su pecho. -¿Cuál es el problema?
-Te estoy queriendo mucho y no debería ser así…
-¿Y porque dices que no debería ser así?
-Porque es injusto, porque yo te estoy queriendo a ti y es posible que también tengas sentimientos hacia Ryan, ¿me equivoco?
*~*
Hola chicas ya estoy aquí, y sí traigo conmigo el capítulo. Espero que os haya gustado.
Este capítulo, me a gustado mucho porque Justin se a abierto completamente a ella, y es
como si se hubiera quitado un peso de encima, le a confesado su amor por ella.
A sido adorable, para comérselo. Grr...
¿Qué os a parecido la confesión de Justin?
¿Y que sentimientos tendrá ella por Ryan?
¡No os perdáis el próximo capítulo!
ily :Enamorado:
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ereѕ nυeѕтra {נυѕтιɴ&тú} #Book 2
FanfikceTodo rondaba por la cabeza de ella, estaba confundida de lo que había pasado con Eduard después de la fiesta que había acudido con su amiga, a la cual había dejado sola sin ninguna explicación. Podría pensar que no iba a dejarla en paz después de es...