Capitulo 20

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Narra Christopher

Abro los ojos confundido y con un terrible dolor de cabeza, me friego los ojos con mis manos y al abrirlos bien noto que no estoy en mi habitación, esta no es mi casa. Siento como alguien se mueve a mi lado y al ver de quien se trata mis ojos se abren como platos ¿Natalia? La miro atentamente y está desnuda, dandome cuenta de todo me miro a mi mismo y noto que estoy en las mismas condiciones, desnudo con ella y en la misma cama ¿Qué demonios pasó aqui? No me acuerdo de nada ¡Dios mio que hice!

Veo como Natalia me mira con una sonrisa de oreja a oreja e intenta acariciarme el rostro pero no la dejo, me levanto alterado empezando a buscar mi ropa por la habitación, cuando la encuentro me empiezo a vestir mientras intento recordar que fue lo que pasó anoche. 

— Peluchin ¿A dónde vas? No me dejes sola después de lo que hicimos anoche. — me dice ella haciendo puchero. La miro por unos segundo y sigo vistiendome.

Ella se levanta de la cama tapándose con las sábanas y se acerca a mi para intentar acariciarme pero la detengo. No, no puede estar pasando lo que creo se está pasando.

No pude hacerme acostado con Natalia. No es posible.

— Natalia ¿Que fue lo que pasó anoche en realidad? Yo no recuerdo querer acostarme contigo. — le pregunto desesperado. No puede ser. Por favor que no me haya acostado con ella.

— ¿No lo recuerdas peluchin? Me hiciste tuya como un loco. No sabes, jamás me hiciste el amor así Christopher. — me dice ella indignada.

— Yo, no....No puede ser. Tengo que irme, tengo que pensar las cosas. — le digo e intento marcharme pero antes...— No, no le digas a Dulce nada de esto por favor, quiero decírselo yo cuando sea el momento correcto ¿Harías eso por mi Natalia? — le pido de favor. No quiero que Dulce se entere, no quiero perderla.

— Esta bien peluchin, no se lo diré  Dulce. Lo prometo. — me promete. Espero que si cumpla su palabra y no se atreva a decirle a Dulce la verdad. Seria mi fin.

Me despido de ella y me marcho rápidamente de su casa, necesito llegar a mi casa, ducharme y pensar bien que voy hacer. Esto no puede estar pasandome a mi. Me subo a mi camioneta que esta aparcada detrás de la casa de Natalia y me marcho a mi rancho. 

*****

Llego al rancho, me bajo  de la camioneta y entro a mi casa donde me encuentro a mis hermanos tomando un café y viendo la televisión. Ellos se voltean a verme al notar ni presencia ahí y me miran atentamente para después sonreír.

— ¿Que pasó hermano? No llegarse a dormir aquí anoche ¿Estuviste ocupado? — Me pregunta Poncho con una sonrisa. Se que es lo que está insinuando.

— ¿Pasaste la noche con Dulce verdad? Eres un tigre bro. — me dice Giovanni con una sonrisa pícara. Ojalá fuera cierto que fue con Dulce pero no es así.

No les respondo a ninguno de los dos, soy un imbécil, un puto imbécil. No me acuerdo si me acosté o no con Natalia. Joder. Me siento agobiado en el sofa agarrándome los cabellos.

— ¿Que pasa hermano? Te voy muy preocupado. — me pregunta Poncho. Suspiro. Necesito decirle a alguien.

— No fue Con Dulce, fue con Natalia. Pasé la noche con Natalia y lo peor de todo esque no me acuerdo de nada.   — le confieso a mis hermanos. Ellos se me quedan mirando con la boca abierta sorprendidos. 

— ¡¿Qué?!¡Dulce te va a matar! —  gritan mis hermanos.

—  Si si, ya lo sé que me va a matar si se entera por eso mismo no quiero que se entere todavía. —  les digo. Ellos me miran negando con la cabeza.

Irresistible TentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora