Capítulo 28

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Era un día nublado y con grandes posibilidades de llover. Y así sucedió, en ese momento por un callejón con la ropa toda rasgada y llena de cortadas por el cuerpo corría una chica de cabellos celestes.Una chica que en esos momentos parecía un alma en pena, por la pálido de su piel y su deplorable estado.La chica corrió todo lo que pudo, como si quisiera huir de algo o alguien, llegando así a un almacén abandonado.Al entrar lo primero que hizo fue tratar de cerrar la única entrada que tenía que era un gran portón, así que haciendo uso de fuerza lo cerró. Acostada en el piso, recuperando el aliento por tanto correr por un momento pudo sentir paz en su interior cosa que no duró mucho.Porque empezaron a sonar golpes detrás del portón.

Nejire: ¡Por favor! ¡Déjame en paz!. -grito la chica en forma de súplica.Pero nadie respondió y los golpes seguían.

Nejire: ¡Que es lo que quieres de mí!. - exclamó, mientras retrocedía y ponía cosas para trancar la puerta.Pero seguía sin oír una respuesta.

Nejire: ¡Sé quién eres!. - grito lo más fuerte que pudo para que pudiera ser escuchada, hasta que escuchar parar los golpes.-Déjame ir y jamás le diré a nadie quien eres.- contestó un poco más calmada, tratando de hacer entrar en razón al tipo del otro lado cosa que no funcionó. Los golpes volvieron a sonar, asustando nuevamente a la chica peliceleste.

Nejire: ¡Te juro que le diré a los héroes de tu traición!.-Comentó en forma de defensa ante los ruidos, hasta que todo quedó en silencio pero fue roto por una gran explosión, la chica corrió y se escondió detrás de unas cajas que habían en el depósito mientras que la niebla por la explosión se dispersaba del lugar.Se podían escuchar pasos por el lugar, la chica se encontraba llorando por miedo a lo que pueda suceder trató de levantar la mirada pero de pronto fue agarrada del cuello.Se pudo escuchar un grito desgarrador desde afuera de aquel depósito abandonado.

En otro lugar de la ciudad podemos apreciar a una silueta sentada detrás de un extraño sillón rojo, el cuarto desordenado, se podían encontrar fotos tiradas por todos lados y unas manchas medio rojizas en los pisos y paredes, extrañamente daba la sensación de que algo turbio había sucedido en ese lugar.

Himiko: Sigo sin entender el plan.- comentó mientras daba pequeños pasos tratando de no pisar las asquerosas manchas del piso.- Este lugar es un basurero.

Hombre Misterioso: Puedes cerrar tu estúpida boca por un segundo.- bramo serio.

Himiko: Esta bien, me callare.- comento de una forma burlesca causando una cierta molesta en su compañero.- Por cierto, El cumpleaños de Izuku ya se acerca.

Hombre Misterioso: Sí , lo sé.- respondió eufórico. - ¿Hiciste lo que te pedí?. - preguntó, mirando de reojo a su compañera, la cuál solo asintió.-Antes de eso, necesito ir a ver algunas cosas.- comento mientras movía unos pequeños lápices de su escritorio.- Así que todo está en tus manos ahora.

Himiko: No es justo, dijiste que me podría divertir hasta el día de la fiesta.-Respondió molesta mientras quedaba cara a cara con su compañero o más bien con su mascara.-Esta que se pudre allá abajo.-Escupió mientras se cruzaba de brazos.

Hombre Misterioso: No le pasará nada, yo me encargo de eso.-respondió tranquilo.- Además, ya te divertiste con ella, ahora es mi turno.- comento mientras que con unas de sus manos agarraba una foto de Ochako.

Himiko: Ella no te hizo nada a ti, En cambio a mí me robó al amor de mi vida.- grito molesta por el comentario de su compañero, él cual con una velocidad increíble le puso un dedo sobre sus labios en señal de silencio.

Hombre Misterioso: No hagas ruido, que se puede levantar.-comento con una voz sádica y escalofriante que hizo temblar a la mismísima Toga Himiko.- Ya Hablé, y lo que yo digo se cumple.- Soltó a la chica y está pudo respirar una cuantas veces antes de volver a hablar.

Himiko: Ella me arrebato lo único que tenía.-comento de una forma sumisa mientras evitaba mirar a su compañero.- ¿Qué te hizo a ti?.- Preguntó mientras por primera vez pudo ver un como la persona con la que llevaba meses trabajando se sacaba la máscara.

Hombre Misterioso: Nada.- fue su única respuesta.- Tal vez en el futuro entiendas el porqué hago esto.-comentó, mientras salía de la habitación.

Himiko: ¿Amor?.- preguntó, antes de que su compañero se fuera.

Hombre Misterioso: Pena.-fue lo último que dijo antes de salir, dejando a su compañera pensando.

Ochako y Izuku se encontraban paseando por medio de una concurrida calle agarrados de las manos, la escena era tan dulce y pura sacada de una película de amor basada en libros.Su amor por fin era correspondido, sin penas y perjuicios, después de tantos años podían sentirse completos.Mientras ellos estaban encerrados en su propio mundo lleno de amor, una angustiada chica de cabellos celestes se encontraba caminando por la misma calle. La chica no había tenido noticias de su novio por lo que decidió ir a buscarlo a su departamento, trato de sacar su teléfono móvil del pequeño bolso que traía, siguió caminando y con teléfono en mano levantó la mirada encontrándose con una escena que le rompería el corazón.

Nejire: ¿Izuku?.-se preguntó así misma, mientras veía cómo la pareja no se percataba de su presencia pero seguían caminando a dirección contraria a la suya.

Ochako: ¿Qué vamos a desayunar amor?.- preguntó alegremente, mientras veía a su novio con una cara de duda mientras hacía un pequeño puchero.

Izuku: ¿Qué te pediría de desayunar para que estés contenta?.- comentó mientras hacía sonrojar a su novia.- Los mochis son perfectos para celebrar.- dijo alegre, haciendo que su novia suelte una gran sonrisa.

Ochako: Te amo.- comento, mientras apretaba un poco el agarre de manos.

Izuku: Yo también te amo.- dijo con una gran sonrisa en su pecosa cara.Mientras ellos seguían su camino por su lado una chica de ojos azules pasó por su costado pero ellos ni se percataron y siguieron su camino.

Los ojos de la chica peliceleste empezaron a cambiar de unos celestes claro a unos color amarillo y su cara empezó a deformarse dejando a ver una chica totalmente distinta de la otra mitad de su rostro.Levantó su mano y empezó a hablar por el teléfono que tenía.

Himiko:¿Hola? Cambio de planes.

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Hola mis amores, a pasado mucho tiempo desde la última vez que escribí pero ahora sí con todos los ánimos y las cosas en orden podemos continuar con esta historia.Estoy muy feliz de que a pesar de mi inactividad la historia a ido avanzando en vistas y comentarios, gracias a todos. Y bueno como pueden ver acabo de revelar uno de los secretos de la historia, vi unas cuantas veces esta teoría y me alegro ver su gran interés por la historia y que ya sabían que todo estaba conectado.Vamos a continuar con todo esto, y justo siento que la historia está en el punto que deseaba llegar y espero su lindo apoyo.
Este capítulo va a un gran amigo que gracias a esta plataforma conocí.

Este capítulo está dedicado a HectorJrHernandez Feliz cumpleaños.

Nos vemos amores, Cuídense mucho.

UN DESTINO JUNTOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora