4. Fotógrafa, modelo y Tannie.

34 2 0
                                    

-Entiendo. -digo poniendo el vaso con jugo de naranja en el comedor enfrente suyo, me siento abrazando mi taza de te frio con las dos manos. -Supongo que no vale de nada decir que espero que le bajen a la intensidad, todos son muy perfeccionistas. 

Asiente. -Somos así a nivel personal, de grupo y por el deber y responsabilidad que sentimos con ARMY.

Le sonrío. -Gracias...

-Pensé que no eras ARMY.

-Touché, pero los admiro y disfruto de su movimiento social, veo su esfuerzo en la música que sacan y en toda la elaboración que le ponen a los conciertos.

-Buen punto.

-Quieres descansar un poco antes de irte? Tengo una habitación que puedes usar para descansar o te gustaría más mi habitación?

-Oh, podría usar la habitación, gracias. -se toma el vaso y va a lavarlo sin decir una palabra, yo me levanto y abro la puerta de la habitación pequeña, prendo una vela de lavanda.

-Que es eso? -pregunta entrando a la habitación.

-Lavanda, puede ayudarte a relajarte.

-Gracias... -dice sentándose y acariciando las sabanas.

-Necesitas algo más? Pongo música por el sistema de sonido, traigo mi laptop para que veas películas? Quieres cargar tu celular?

Se queda mirándome un tiempo largo y termina por sonreír cuando tildo mi cabeza algo perdida en la razón de su mirada.

-Te tomo la palabra con lo del cargador...

Su mano me sostiene la muñeca cuando voy a por el cargador.

-Kateu?

-Sí?

-Que eres?

-Una persona.

Se ríe como si fuera el chiste más genial del mundo, no entiendo su pregunta.

-Eres difícil de leer.

-Hay gente que dice que no tengo sentimientos, al no tenerlos no los expreso.

-No tienes sentimientos? Como eres tan amable?

-Supongo que los tuve, luego de perder a alguien se han quedado guardados bajo llave y ya no la encuentro, me enfoco en imitar a los demás... 

-Como es eso?

-Tu eres amable conmigo HoSeok, yo soy amable contigo. Tu me respetas, yo te respeto. Algo así...

Asiente y lentamente deja mi muñeca. Vuelve a llamarme cuando estoy un paso afuera de la habitación.

-Gracias. 

-No hay problema, siempre que pueda.

Lo dejo descansar más o menos una hora antes de que lo llamen y tenga que irse. Me sorprendo despidiéndolo y dándole un pequeño tupperware con algo de fruta y queso para que coma algo por el camino.

El domingo muy temprano en la mañana, TaeHyung llega a mi apartamento.

-Vamos, abre...

Gruño por el comunicador y presiono el permiso para abrir la puerta del edificio.

Me peino el cabello con los dedos y me pongo la diadema de oso para asegurarlo fuera de mi cara, me pongo una bata larga para ocultar la pequeña pijama que tengo puesta y abro mi puesta al sentirlo tocar.

-Quieres hacer algo especial hoy? -pregunta entrando. Mis ojos van a su cachorro.

-Hola tu... -digo cerrando la puerta y arrodillándome a acariciar a la bolita de pelo negra.

Hiraeth.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora